Recepción de jeque a Benzema
El futbolista francés es presentado como nuevo jugador del Al Ittihad ante 35.000 personas. “Es importante para mí estar en un país musulmán”, aseguró en la rueda de prensa.
Más que a un deportista de élite, más que una estrella mediática, incluso más que Cristiano Ronaldo hace solo seis meses, Karim Benzema fue tratado como un jeque más en Arabia Saudí. No es para menos. El nuevo jugador del Al Ittihad ha firmado un contrato con el equipo árabe a razón de casi 300 millones de euros por tres años. Ni siquiera Cristiano, que ganará 500 millones por estar vinculado al Al Nassr siete años (dos como jugador y cinco como embajador), ganará tanto por temporada. Ventajas de ser el actual Balón de Oro. Por todo ello, su presentación como futbolista del equipo saudí pareció una recepción de Estado a la que acudieron casi 35.000 personas al estadio King Abdullah Sports City de Yeda.
Desde el primer momento, Benzema se ganó el corazón de los aficionados saudíes, a los que quiso conquistar haciendo alusión a sus orígenes, cultura y religión. “Es un país hermoso, y es donde quiero estar. Es importante estar en un país musulmán donde ya siento que la gente me quiere, me permitirá tener una nueva vida. Quiero hablar el árabe con fluidez. La Meca está cerca, soy creyente, así que es importante para mí. Estoy en mi lugar”, aseguró el delantero francés a través de los canales y redes sociales del Al Ittihad antes de ir hacia el estadio para ser presentado ante su nueva afición.
Las puertas del King Abdullah Sport City se abrieron tres horas antes de la presentación oficial, programada para las 20:30 horas y el estadio se llenó a la mitad cuando todavía quedaba una hora para que la nueva estrella del Al Ittihad saltara al césped con su nueva camiseta. La pared externa del recinto, una modernidad que actúa como fachada y pantalla gigante, proyectaba una imagen de Benzema posando con la equipación negriamarilla, pero el público estaba ansioso por verle con sus propios ojos.
El público cantaba ‘¡Karim, Karim!’ y de repente, a las 20:45 horas, las luces del estadio se apagaron. Los móviles alumbraban el césped. Una música de hip-hop empezó a sonar y en las pantallas se emitió un vídeo con los mejores momentos de la carrera de Benzema. Cuando terminó, el speaker anunció su entrada: ¡BENZEMA!
Entre gritos de la muchedumbre, el francés saltó al césped vestido con su nueva equipación y el 9 a la espalda bajo una juego de luces más propio de una inauguración de un Mundial que de la presentación de un futbolista. El francés atravesó un pasillo de niños que le aplaudían hasta cruzar una pasarela que le condujo al escenario principal. A su paso, los fuegos artificiales iban saltando hasta que tomó la palabra y agradeció, en inglés, la presencia a los asistentes. Justo después, Abdelwahab Abed, CEO del Al Ittihad, le acercó su Balón de Oro y Benzema lo mostró al público, que estalló de júbilo. Probablemente, nunca habían visto uno tan de cerca.
Jugar contra Cristiano
En la rueda de prensa, Benzema también habló de la posibilidad de jugar contra Cristiano Ronaldo, que fue su compañero en el Real Madrid durante diez temporadas y que ahora juega en el Al Nasrr, uno de los principales rivales del Al Ittihad: “También es importante que Cristiano Ronaldo esté en Arabia Saudí, porque es un jugador muy importante. Aporta mucho al fútbol de este país y eso elevará aún más su nivel de juego. Así que es importante demostrar que el fútbol saudí puede tener un impacto global, porque no se trata de jugar en Arabia Saudí o no”.