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INGLATERRA

Oficial: Conte, fulminado

El Tottenham y el técnico italiano rescinden de común acuerdo. Sus declaraciones tras el empate ante el Southampton, el detonante. Stellini, su ayudante, se hará cargo del equipo hasta el 30 de junio.

Londres (Inglaterra)Actualizado a
Antonio Conte, destituido como entrenador del Tottenham.
RUSSELL CHEYNEREUTERS

La salida de Antonio Conte del Tottenham Hotspur Stadium era cuestión de tiempo. Tal y como informó el diario británico Telegraph, “se espera que el Tottenham acuerde esta semana la salida de Antonio Conte del club”. Y es que el ambiente en el seno interno del club después las declaraciones del técnico italiano que tuvieron lugar tras empatar 3-3 contra el Southampton era “prácticamente irrecuperable”. Es por eso que desde el norte de Londres han optado por prescindir de los servicios de Antonio Conte para lo que resta de temporada, de común acuerdo. A través de un comunicado, los Spurs han anunciado que este deja de ser entrenador del cuadro londinense tras más de 500 días en el cargo. Si bien la situación del Tottenham en la Premier League no era dramática, ya que los Spurs siguen ocupando la 4ª plaza y están a tan solo un punto del Manchester United, que es 3º, la relación entre los jugadores y el italiano estaba completamente rota.

Desde Inglaterra informaron que Antonio Conte, que puso rumbo a Italia días atrás, explicó a Daniel Levy que “sus críticas iban dirigidas a la plantilla y no al presidente de los Spurs o al club”, pero igualmente este “no se retractará de sus comentarios sobre la plantilla”, lo cual hacía inviable que continuara ocupando el banquillo local del Tottenham Hotspur Stadium. El entrenador italiano tildó a los futbolistas Spurs de “egoístas” y asoció el conformismo y impasibilidad al hecho de que el Tottenham no hubiese ganado nada importante en toda su historia. Esta ha sido la gota que ha colmado el vaso de la paciencia en el norte de Londres. Si bien Antonio Conte nunca se había expresado con tal franqueza sobre la situación del club, esta no era la primera salida de tono del italiano en una rueda de prensa. Las dudas sobre su continuidad, ya que terminaba contrato en junio de 2024, siempre estuvieron encima de la mesa. Antes de anunciar su salida, Daniel Levy tuvo que negociar con el italiano una compensación económica cercana a los 5 millones de euros.

Ahora, durante el presente parón de selecciones, le ha llegado el momento al presidente del club para que decida quien debe tomar las riendas del equipo. El presidente del Tottenham, como recogen en el Telegraph, “es consciente de que no le resultará fácil sustituir a Antonio Conte por un entrenador de primer nivel, ya que el técnico de 53 años ha dejado al descubierto los problemas que, en su opinión, existen en el club y en la plantilla”.

Cristian Stellini, hasta su ayudante, se hará cargo del equipo hasta final de temporada, cuando Levy encuentre nuevo entrenador; las opciones, según The Telegraph incluyen a Luis Enrique y Mauricio Pochettino, todos ellos sin trabajo. Otras, más complicadas, ya que se encuentran inmersos en diferentes proyectos son Ange Postecoglou (Celtic de Glasgow), Oliver Glasner (Eintracht de Fráncfort), Roberto De Zerbi (Brighton) y Thomas Frank (Brentford).

Con Antonio Conte oficialmente fuera del Tottenham, su balance podría tildarse de excesivamente positivo. Y es que desde Inglaterra llegan dudas de que la plaza de Champions League lograda por los Spurs durante la 2021/2022 no fuera un éxito acorde al nivel real de la plantilla. La apuesta por Nuno Espírito Santo en el banquillo local del Tottenham Hotspur Stadium fue un fracaso, y la directiva londinense optó por lanzarse a por el técnico italiano a principios del mes de noviembre de 2021. Después de 76 partidos en el cargo, Antonio Conte no solo ha conseguido asentar al Tottenham por segunda temporada consecutiva en los puestos más altos de la clasificación, sino sacar la mejor versión de algunos de sus futbolistas. Sin embargo, el siempre incendiario entrenador italiano era una bomba de relojería que terminó estallando dentro del vestuario.