Mundial de Clubes 2025

Musiala está de vuelta

El crack anotó un hat-trick en poco más de un cuarto de hora durante su reaparición tras dos meses de calvario por un desgarro en el isquio.

Jamal Musiala, del Bayern.
Juan Ignacio Roncoroni
José Carlos Menzel
Nacido en Múnich en 1989, pero de familia e idiosincrasia sevillana. Comenzó en AS en 2013. Cubre toda la información sobre la Bundesliga, la Mannschaft y los equipos alemanes en competiciones europeas. En la República Federal es redactor de TZ, para el que suele centrarse en las noticias del Bayern, para el que jugó en las categorías inferiores.
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Después de más de dos meses alejado de los terrenos de juego por un desgarro muscular en el isquio, Jamal Musiala volvió con todo. El crack alemán firmó un hat-trick en apenas 17 minutos durante la paliza de 10-0 del Bayern de Múnich al Auckland City en su debut en el Mundial de Clubes. Musiala, de 22 años, no solo se llevó el balón del partido como recuerdo, sino también los aplausos y elogios de compañeros, técnico y directivos. “Jamal está de vuelta con un hat-trick. Es simplemente excepcional”, declaró entusiasmado el director deportivo del club, Max Eberl.

El duelo, disputado en Cincinnati, sirvió como escenario perfecto para la reaparición de un Musiala que demostró no haber perdido ni un ápice de su magia. Primero, anotó el 7-0 por medio de una brillante rosca desde la frontal. Luego, convirtió con frialdad un penalti que él mismo había provocado y, por último, interceptó un pase del portero rival para completar el hat-trick con el 9-0. Más allá de los goles, su entrenador Vincent Kompany destacó una acción defensiva como símbolo de su compromiso: “Lo que más me impresionó fue un sprint hacia atrás para ayudar en defensa. Hacer eso en este tipo de partido demuestra que tiene una base sólida”, subrayó el míster.

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Como premio al resultado, Kompany concedió un día libre a sus futbolistas en la concentración de los muniqueses en Orlando. Musiala, por su parte, disfrutó visiblemente de su regreso: posó con el balón sobre el césped del TQL Stadium antes de llevarlo consigo al avión del equipo. “Cuando un jugador ofensivo marca, siempre es buena señal. Hoy no necesitará muchas palabras sobre el partido y mañana se sentirá aún mejor”, resumió Kompany, satisfecho con la actuación de su joya. Los bávaros sonríen: el mago está de vuelta.

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