Motta va para técnico grande
El exfutbolista de Barcelona y Atlético es la sensación de Italia con el Bolonia. Con mucha proyección, su nombre comienza a sonar para ocupar el banquillo del PSG o del Inter a corto plazo.
Es el entrenador de moda en Italia. Su Bolonia va como un tiro en Serie A y ya tiene cerca los puestos europeos. Thiago Motta (40 años, Brasil) está revolucionando la liga italiana desde su aterizaje en septiembre en el Bolonia. El técnico, con nacionalidad italiana, cogió al equipo coqueteando con la zona baja en la Serie A y ahora aspira a Europa, sobre todo tras vencer al Atalanta a domicilio por 0-2 el pasado fin de semana. Hay efecto Bolonia en Italia.
Este sábado, el equipo rojiazul recibe al Milan en su estadio en un partido que puede ser un punto de inflexión para el club de Emilia-Romaña. El balance de Motta al frente del Bolonia es más que bueno: 12 partidos ganados, 4 empates y 9 derrotas. Unos números que le colocan entre los mejores del campeonato y la alternativa a los grandes equipos italianos: Nápoles, Milan, Inter, Roma, Lazio, Atalanta...
Para los que no conozcan al Bolonia de Motta, el exfutbolista de Atlético y Barcelona está sacando mucho provecho a su habitual dibujo de 4-2-3-1. Motta está mejorando a jugadores que no han terminado de explotar en otros equipos como por ejemplo los ex del Villarreal: Roberto Soriano y Nicola Sansone. Dos de los pilares ofensivos del equipo. Otro veterano con minutos es Gary Medel. También ha sabido sacarle todo el rendimiento a la calidad de Riccardo Orsolini y del escocés Lewis Ferguson. Por no hablar de que ha tenido que lidiar con las continuas ausencias de Marko Arnautovic, uno de los líderes del vestuario. Unas circunstancias de las que Motta ha sabido salir airoso.
Mucha expectación sobre su futuro
Thiago Motta ha experimentado una evolución signitificativa desde que se sentara por primera vez en un banquillo. Su aventura en el Genoa duró 10 partidos. Una temporada entera estuvo dirigiendo al Spezia, al que mantuvo en la máxima categoría. Y ahora, llegó al Bolonia como solución de urgencia y viendo los resultados, fue una decisión muy acertada. Su proyección es tan alta que su nombre suena con fuerza para ocupar banquillos de más postín, no sólo en Italia. Con un pasado como jugador en las filas del Inter, siempre se le ha vinculado con sentarse en el Guiseppe Meazza y más cuando el futuro de Simone Inzaghi es una incógita. Pero no sólo se ha nombrado a Motta para equipos italianos.
Ya se le vinculó al PSG en el pasado y ante la posible salida de Galtier del Parque de los Príncipes su nombre comienza otra vez a vincularse al club de París. Una entidad que conoce bien ya que fue entrenador sub-19 y el club en el que colgó las botas tras seis temporadas vistiendo su camiseta. Hay pocas dudas de que los destinos de PSG y de Motta se terminarán cruzando. Al igual que el Atlético de Madrid. No tuvo mucha suerte en su paso por el conjunto rojiblanco por las lesiones, pero dejó un sabor de boca en la parroquía atlética. Motta estará en la terna cuando Simeone salga del Metropolitano. De momento, Motta tiene contrato firmado hasta 2024 pero se prevé verano movidito.