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BRASIL

Marcelo se reinventa

El exjugador del Real Madrid es una pieza fundamental en Fluminense, donde recibe elogios de su entrenador, Fernando Diniz, quien no duda en sacarlo del lateral izquierdo.

Marcelo celebra un gol de Fluminense.
Antonio Lacerda
Óscar García
De Moratalaz. Licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense. Fue uno de los cinco primeros becarios en la historia de AS (1994). Estuvo seis años en PC Fútbol y entre 2002 y 2014 en AS.com. Pasó por TMG, A la Contra, archivo del Mº de Justicia y deportes de La Razón. En 2022 volvió a AS como jefe de sección de AS América.
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El inagotable talento de Marcelo le permite continuar asumiendo retos y superarlos con la misma facilidad y naturalidad que lo ha hecho en su dilatada y brillante carrera. La última prueba que le ha puesto su entrenador, Fernando Diniz, es situarlo como volante contra Cruzeiro. Fluminense agradeció la presencia en el centro del campo de Marcelo, que solventó el desafío con nota.

Tan satisfactoria fue la actuación de Marcelo, que Diniz, que también ejerce como seleccionador interino de Brasil, no descartó que el veterano futbolista, de 35 años, pueda volver a ocupar esa posición en el futuro. “Es una opción. Por supuesto no es su posición original, pero podría, en algún momento, pasar a esa posición, posiblemente jugar en un partido o durante el encuentro podríamos utilizarlo en ese puesto”, aseguró Diniz.

La base para esa adaptación de Marcelo al centro del campo está en el gran talento del lateral izquierdo y así lo entiende el técnico de Fluminense: “Marcelo es un jugador por encima de la media desde el punto de vista técnico. Extremadamente talentoso. Uno de los mejores jugadores que hemos visto en los últimos 15 años en el fútbol mundial. Cada vez se encuentra más a sí mismo en Fluminense, es feliz, siempre ayuda a los chicos y siempre es un placer ver jugar a Marcelo. Espero que tenga una larga vida en el fútbol”.

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Contra Cruzeiro entró en el campo en el minuto 66, junto a Leo Fernández, y el juego de Fluminense se desatascó. Favorecido también, sin duda, porque nada más pisar el césped, el uruguayo convirtió de falta el único gol del encuentro.

Liberado de sus obligaciones defensivas en el lateral, Marcelo comenzó su recital. Metió velocidad a los ataques de Fluminense, aportó imaginación a las combinaciones ofensivas del equipo y divirtió al público con sus controles y regates. Generó todo el fútbol que le había faltado al equipo y su destacada actuación dejó en el aire la duda de si Fernando Diniz volverá a utilizar a Marcelo como volante el próximo miércoles contra Internacional, en la ida de semifinales de la Copa Libertadores. Si Ganso se recupera a tiempo, quizá Marcelo regrese a su posición natural en el lateral izquierdo, pero en los medios de Brasil ya hay quien pide que el exjugador del Real Madrid comparta espacio ese día en el centro del campo junto a Ganso.

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