Los penaltis condenan al United

Se le agotan las opciones de título al Manchester United. El vigente campeón de la FA Cup quedó apeado en la quinta ronda frente a un Fulham que avanza a los cuartos de final después de que su guardameta, Leno, sacase los tiros de Lindelöf y Zirkzee. Eliminado de las dos copas inglesas, y a trece puntos de los puestos europeos, la Europa League se asoma como el último resquicio de los de Amorim para clasificarse para competiciones continentales. Deberán ganarla antes, aunque la confianza escasea en Old Trafford.

El United empezó fuerte. Fernandes y Eriksen generaron las primeras ocasiones. Intentos que Leno salvó antes de que Hojlund y Zirkzee volviesen a la carga. Luego se diluyeron los mancunianos. Y crecieron los londinenses, que estuvieron a punto de abrir el marcador superada la media hora de juego. Lukic arrancó en busca de un buen centro de Iwobi, pero pese a estar en condiciones de marcar, el serbio no consiguió dirigir su cabezazo entre los tres palos. Quien sí lo hizo fue Bassey en el primer minuto del añadido. Pereira sacó un córner que Muñiz prolongó y que Bassey mandó a la red. Onana no pudo evitarlo. Y su equipo no supo reaccionar.

Hubo que esperar un cuarto de hora para que los locales generasen su primera ocasión del segundo tiempo. Leno detuvo cómodamente el cabezazo de Mazraoui, y en la otra portería, Onana tuvo más problemas para sacar un tiro raso de Smith-Rowe. Se frustraba Old Trafford, se hundía el United. Un equipo demasiado regular en su irregularidad. Desquiciado. Hasta que Fernandes apareció a falta de veinte minutos. El portugués cambió la dinámica del partido y el ánimo de la grada con un disparo raso tras un pase atrás de Dalot desde la izquierda. El balón pasó por debajo de un defensa y se fue alejando del alcance de Leno y alojándose en el fondo de las mallas.

Empezó un nuevo partido, aunque Muñiz pudo evitarlo acto seguido, después de batallar con su par por el balón dentro del área. Su remate terminó en un insípido saque de esquina. Ganó en tensión el encuentro, pero perdió efervescencia sobre el césped. El marcador, y la necesidad de decidir qué equipo avanzaba de ronda mantuvo la emoción. El juego, en cambio, no estuvo a la altura. Escasearon las ocasiones en el tramo final, con Onana salvando la más clara de todas. Un nuevo disparo de Smith-Rowe que el cancerbero despejó lanzándose al piso.

La dinámica se mantuvo en el inicio de la prórroga, y solo Obi intentó romper las tablas con un disparo fuerte que Leno palmeó a saque de esquina. Subió el ritmo cuando se reanudó el juego en la segunda mitad del tiempo extra. Onana rescató nuevamente al United después de que Sessegnon recibiese en la banda derecha, recortase hacia el centro y disparase. Los equipos echaron el resto entonces. Se sucedieron las carreras de una portería a la otra, pero no hubo goles. Éstos llegaron en la tanda de penaltis, donde las paradas de Leno frente a Lindelöf y Zirkzee mandaron al Fulham a los cuartos de final.

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