La incertidumbre de Demichelis

Para Martín Demichles, dirigir un Superclásico no es algo novedoso y ya sabe a lo que se enfrentará una vez el balón echa a rodar este domingo. El octubre pasado, se llevó la victoria de La Bombonera gracias a los goles de Salomón Rondón y Enzo Díaz, un resultado que buscará repertir en el primer gran enfrentamiento del año ante Boca Juniors.

River Plate llega un un paso por delante de su rival en esta jornada 7 aunque tampoco hay una gran distancia. Al igual que Boca, el Millonario no brilla en ataque ni en defensa; va sacando resultado más por el nombre que por el juego que práctica, y sus resultados son más positivos que los del Xeneize. Sin embargo, en un Superclásico, todo queda en un segundo plano y no suele ser el mejor escenario para realizar cualquier tipo de ensayos.

El enfrentamiento antre el eterno rival deja al técnico argentino con varias dudas en torno al once que utilizará. Una de ellas es encontrar al mejor socio de Colidio, donde tiene dos opciones: Solari y Claudio Echeverri. Los dos jugadores se incorporaron más al equipo debido a la participación en el Preolímpico y respondieron con nota cuando salieron frente a Banfield. Para el Diablito sería un encuentro especial porque sería su única oportunidad de jugar contra Boca en el Monumental antes de poner rumbo a Inglaterra.

El otro gran frente que se le plantea a Demichelis es armar un centro del campo fuerte con dos pivotes y tres volantes por delante. Y por último es saber quién será su lateral derecho, si apuesta por Sant’Ana o por Herrera. El argentino tiene varias incertidumbres que resolver antes de que arranque el Superclásico, el cual podría definir lo que serán las próximas semanas de competición.