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FALLECE LUIS SUÁREZ

Italia llora a su ‘Luisito’

El español hizo historia en el Inter y siempre fue muy querido en el país de la bota, que le apreció dentro y fuera del campo.

Luis Suárez, en un partido del Inter contra el Real Madrid.
Luis Suárez, en un partido del Inter contra el Real Madrid.DiarioAS

Italia sufre como España el fallecimiento de Luis Suárez, para el que siempre tuvo un cariño enorme. El Balón de Oro en el país de la bota (donde siempre le llamaron Luisito) hizo historia en el campo y fue un personaje muy presente en las tertulias del Calcio durante décadas. Su periplo italiano arrancó gracias a Helenio Herrera, que ya trabajó con él en el Barça y, una vez llegado al Inter, le pidió al presidente Angelo Moratti vender a Angelillo e invertir para llevarse a ‘Luisito’. La operación costó 25 millones de pesetas y le permitió al Barça mejorar el Camp Nou ampliando sus gradas. Suárez vistió la camiseta nerazzurra de 1961 a 1970, sumando 333 partidos y 55 goles.

El español se convirtió en el eje de la Grande Inter cambiando su papel, jugando más atrás y tomando las riendas del mediocampo. Fue el ‘regista’ de una era legendaria que llevó tres scudetti, dos Copas de Europa (más una final perdida, en 1967, contra el Celtic) y dos Intercontinentales. El histórico periodista Gianni Mura le definió “un poco bailarín, un poco torero” y no hay interista que no recuerde sus perfectos pases largos para las llegadas rápidas de Mazzola y Jair. Cerró su etapa como futbolista con tres años en la Sampdoria, donde volvió a mostrar su talento y se ganó una última convocatoria en la Selección, en 1972, con 37 años.

Italia estuvo muy presente también en su etapa como entrenador, que empezó en el Genoa en 1973, nada más colgar las botas. Fue el técnico de su querido Inter en tres ocasiones (1974, 1992 y 1995) y Massimo Moratti también le quiso en la directiva. Mazzola, en noviembre de 2022, celebró en Milán su 80 cumpleaños y quiso a Luisito a su lado. “Mírame a mí, puedes estar tranquilo”, le dijo el español al italiano, siete años más joven, que hacía gestos supersticiosos. Sandro y toda Italia le echarán mucho de menos.