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Turquía

Icardi: objetivo San Mamés

El argentino decidirá en un par de días si pasa por el quirófano. Quiere volver en abril y esperar que el Galatasaray esté todavía peleando por la Europa League.

Mauri Icardi en el momento de su lesión.
OZAN KOSEAFP

Mauro Icardi decidirá en un par de días si pasa por el quirófano tras romperse el ligamento cruzado anterior y el menisco. El argentino volverá a Estambul para confirmar si el edema provocado por su lesión grave ha desaparecido. Según esos resultados determinará si tiene o no que pasar por el quirófano. Probablemente, el delantero será operado en Estambul y, después de la cirugía, comenzará el periodo de recuperación. El atacante desea volver a jugar antes de que termine la temporada, sobre el mes de abril. Al menos, se plantea jugar en los últimos cinco partidos. En su cabeza está disputar la parte final del curso para poder pelear por un título. Su deseo es, para cuando pueda volver, que el Galatasaray esté en condiciones de pelear por el título en la Europa League, ya que su sueño es jugar la final de la Europa League en Bilbao en mayo.

El doctor Yalcin Yavuzer, uno de los médicos más reputados en lesiones en Turquía, asegura que Icardi necesita al menos seis meses. Si volviera antes estaría tomando un riesgo para lo que le resta de su carrera deportiva. El atacante (31 años) se rompió el ligamento cruzado anterior y del menisco de la rodilla durante el partido de la Europa League contra el Totthenam, que ganó el Galatasaray por 3-2.

A Icardi le quedan dos años más de contrato con el club turco, los cuales está determinado a cumplir. Además, toma cuerpo la opción de retirarse con la camiseta de los Leones al jugar cinco años más. El argentino es feliz en Estambul. Cobra diez millones netos por temporada más bonus y para la afición es un icono. Si ahora pasara por el quirófano, el Galatasaray reevaluará en un mes la situación. Si la vuelta de Icardi no apunta a los plazos anteriormente expuestos, se planteará ir al mercado y, entonces, el nombre de Luka Jovic aparece como opción a préstamo para enero.

Mientras, en su vida extradeportiva, Icardi atraviesa un momento complicado. El atacnate está en Buenos Aires para gestionar los detalles del proceso de divorcio con Wanda Nara. La que es todavía su esposa ha interpuesto una denuncia por violencia de género, en lo que es un episodio más de la volcánica relación que han mantenido y que ellos mismos han aireado constantemente. “Es una exageración de Wanda. No ejercí ninguna violencia. Tengo mis derechos. Ella lleva todo el plano de lo mediático, desvirtúa todo por su propósito personal. Me expuso como un idiota ante el mundo cuando mostró mi mensaje. Eso es violencia psicológica”, expuso el jugador.

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