NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

FRANCIA

El fin de los clanes en el PSG

La salida de Paredes y Di María ha provocado que, paulatinamente, los clanes dentro del vestuario se hayan difuminado. Ahora hay más concordia que antaño.

Actualizado a
Paris Saint-Germain soccer players, from left, Sergio Ramos, Lionel Messi, coach Christophe Galtier, Neymar, Kylian Mbappe and Marquinhos walk to participate during a PSG soccer lesson Monday, July 18, 2022, in Tokyo. Paris Saint-Germain is in Japan for their pre-season tour and will play three friendly matches against Japan's J1 League teams. (AP Photo/Eugene Hoshiko)
Eugene HoshikoAP

No hace mucho tiempo, el vestuario del PSG estaba dividido en clanes. En 2018, sin ir más lejos, justo antes de la prematura eliminación contra el Real Madrid, los brasileños, como Dani Alves y Neymar, llevaban la voz cantante internamente. Los argentinos, además de Cavani, que salió gratis en 2020, también ejercían una fuerte influencia en lo que se podía considerar como una “lucha de clanes”. Según Le Parisien, esta división del vestuario se ha ido difuminando, a tal punto de que los clanes ya no tienen la fuerza de antaño.

La temporada pasada, precisamente después de la dura eliminación en manos del Real Madrid en la Copa de Europa, también hubo reproches entre clanes. El sudamericano, comandado por Neymar y Messi, tenía fuertes discrepancias con el francés, que estaba liderado por Mbappé. Aunque la relación del trío es cordial, aquel duro golpe en Champions aumentó las grietas dentro del vestuario.

Según Le Parisien, el objetivo del dúo Galtier-Campos, aterrizado en junio en París, ha sido el de romper estas distancias dentro del vestuario para fortalecer el colectivo. Di María y Paredes, muy cercanos a Messi, dejaron el PSG en verano. El mediocentro, cedido a la Juventus, reconocía la semana pasada que no quería hablar de Mbappé porque “no tenía relación” con el talento de Bondy. Unas palabras que, evidentemente, no sorprendieron a nadie internamente en París.

El PSG actual no se parece, en absoluto, al de hace tres años en el que los jugadores de dividían entre clanes. Aunque existan grupos diferenciados, como Mbappé, Achraf, Navas, Keylor Navas o Sergio Ramos, la unión se ha fortalecido bastante. De hecho, el central español está ejerciendo de nexo entre muchos jugadores, erigiéndose como un líder en el vestuario después de un primer año para olvidar en París por culpa de las lesiones.

Por ejemplo, otro de los puntos que destaca Le Parisien es la relación entre Keylor Navas y Donnarumma. El último día de mercado, justo cuando se truncó su fichaje por el Nápoles, la dirección deportiva temía una competencia poco sana que podía influir en el rendimiento del italiano. Sin embargo, la cordialidad entre ambos es patente y Verratti ha hecho de apaciguador entre los dos. La unión del vestuario será una de las claves del PSG en las citas importantes a lo largo de la temporada.