BÉLGICA | ECKERT AYENSA
Eckert Ayensa, el ‘español’ que golea en Bélgica
Dennis Eckert Ayensa (Bonn, 1997) atiende a AS. De madre gallega y padre alemán, este delantero del Union Saint Gilloise es la revelación de la liga belga con cuatro goles en tres partidos. Fue canterano del Celta.
Corazón gallego, precisión alemana. Es Dennis Eckert Ayensa, el máximo goleador ahora mismo de la Liga Belga de fútbol. El delantero del Union Saint-Gilloise ha marcado cuatro goles en tres partidos, uno al Anderlecht, otro al Standard y dos al Leuven. “Estoy tan feliz. He trabajado mucho para que llegue este momento. Tengo 26 años y siempre se puede aprender más...”, explica a AS el hispano-aleman, nacido en Bonn, de padre germano y madre de Tuy (Pontevedra).
Eckert Ayensa ha sido internacional Sub-19 con Alemania, pero tiene una fuerte conexión con Galicia. “España es mi país y voy a vivir allí cuando termine mi carrera”. Tanta es su unión, que fue canterano del Celta en una época que reconoce “difícil”: “Disfruté mucho de jugar en el Celta y el Celta B, pero era muy joven y mentalmente no estaba muy bien, vivía solo y no sabía mucho de ser profesional, en los momentos en los que no jugaba como quería me costó mucho tener bien la cabeza”.
Su paso celeste fue entre 2017 y 2019, con una efímera cesión al Excelsior neerlandés, después aterrizó en el Ingolstadt alemán y firmó por el Union Saint Gilloise, la temporada pasada. “Siempre digo que un ojo me llora y el otro me brilla de aquello”, explica Eckert, que ha recalado en un equipo con proyección, propiedad de Tony Bloom, el dueño del Brighton. El Union, histórico en los años 40 y caído a los infiernos después, lleva dos años luchando por la Liga y llegó a cuartos de la Europa League. Este año repiten en esta competición europea.
El Union Saint Gilloise es de naturaleza exportadora y en especial con sus delanteros. De allí han salido en los últimos dos años talentos como Mitoma, Undav, Adingra, Vanzeir o Victor Boniface, vendido al Leverkusen por 20 millones de euros. Ese hueco lo ha cubierto Eckert Ayensa, que no encuentra una explicación exacta a su explosión: “No lo sé, yo intento jugar mi fútbol y ayudar al equipo, mi estilo de juego es el resultado de las fases de mi carrera, en todos lados he podido modificar cosas para ser quién soy ahora. Aunque lo más importante es jugar y estar en el campo, si no juegas no puedes hacer nada”. Humor hispano-alemán.
Heredero de Mitoma, Undav y Boniface
Esta temporada, el Union Saint Gilloise es líder, con tres victorias en tres partidos de la Jupiler league, y eso que han soltado este verano a Adingra, Teuma, Kandouss, Van der Heyden, Boniface, Lynen y Niewkoop. Cosas de los equipos que van bien y venden mucho. “El equipo cambió mucho, pero creo que somos muy indios, jugamos fuerte y nos dejamos todo en el campo, sabemos que hemos perdido calidad individual, así que tenemos que cubrir este hueco con trabajo, y lo estamos haciendo genial”, se jacta Eckert Ayesa, que ha conectado con la gente del humilde estadio Joseph Marien, en el barrio de Forest, afueras de Bruselas: “La afición es espectacular. No puedo decir nada más”.
Una de las claves del buen nivel de Eckert Ayensa también pasa por el entrenador Alexander Blessin, alemán que llega de entrenar al Genova, que ha apostado por Eckert en punta: “Es un entrenador que sabe lo que quiere, es duro pero con un corazón muy grande, estilo papá. Siempre tiene al grupo cerca, hace bromas y tiene alegría, pero cuando quiere que nos concentremos nos pide que nos concentremos y puede alzar la voz. Tiene un equilibrio top”.
“La Liga Belga es muy ofensiva”
Eckert disfruta del estilo vivo y alegre de la Liga Belga, que ha dado pasos importantes con equipos con inversiones fuertes como el Amberes o el Brujas (llegó a octavos de Champions en 2022). “Es una liga muy ofensiva, todos los equipos quieren marcar muchos goles y arriesgan. Me gusta mucho, es muy competitiva”, asegura Dennis, que no quiere ponerse un tope de goles: “No me gusta decir un número...”.
Puesto a soñar, de cara al futuro, Eckert Ayensa regresaría alguna a vez España: “Me encantaría volver, el Celta es mi casa y siempre sería un placer llevar ese escudo. Pero nunca se sabe qué puede pasar en el fútbol”. Y más fútbol ficción. ¿Si le llamaran a ser internacional, jugaría con España o Alemania? “La pregunta es muy difícil, primero porque es muy complicado que me llamen si somos sinceros. Pero si me llaman sería un placer, me daría igual quién me llamara”. De momento, y si se vuelve a la realidad, Eckert Ayensa golea en la liga belga, con un corazón mitad gallego, mitad alemán.