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CHINA

China explota la burbuja

El mediático fútbol chino se desmorona tras imponer el límite salarial. El Wuhan Three Towns, con un entrenador y un central españoles, gana una liga marcada en las últimas semanas por el repunte de casos COVID.

Hulk, Carvalho y Oscar, con el Shanghai SIPG.
ALY SONGREUTERS

Lejos han quedado esos mercados en los que los equipos chinos fichaban a jugadores muy útiles en la élite europea a base de sueldos estratosféricos. Cada vez que llegaba una oferta desde China daba miedo. Oscar, Hulk, Alex Teixeira, Goulart, Paulinho, Bakambu, Carrasco, Ramires... y más jugadores que les robaron a las grandes ligas. Pero China cambió hace unos años su visión del fútbol nacional y estos jugadores comenzaron a despoblar el país asiático.

“Es normal, ha habido demasiado desfase con los sueldos”, explica Pedro Morilla, entrenador del Wuhan Three Towns, a Diario AS. “Incluso con futbolistas chinos. Es positivo, la viabilidad de los clubes lo necesitaba. Quieren potenciar al futbolista chino y mejorar la selección, a ver si se pueden clasificar para un Mundial”. Pedro habla del límite salarial que ha capado las grandes inversiones en futbolistas extranjeros.

Uno de los clubes más mediáticos, el Guangzhou FC (anteriormente conocido como Guanzhou Evergrande), descendió esta temporada. Un equipo que ganó ocho de nueve ligas posibles en la década de los 2010 y que ahora está sumido en una importante crisis económica que le llevó a desprenderse de sus estrellas internacionales (Paulinho, Goulart o Talisca). La empresa inmobiliaria Evergrande Group propietaria del club coqueteó con la quiebra en septiembre de 2021 cuando sus deudas ascendieron hasta los más de 250 millones de euros.

Hulk y Oscar, con el Shanghai SIPG en 2019.
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Hulk y Oscar, con el Shanghai SIPG en 2019.SAEED KHANAFP

Pero el Guangzhou no es el único con problemas económicos. En 2021, un estudio de Sixth Tone publicó que 12 de los 16 equipos de la Superliga china no están al corriente de pago con sus jugadores. La pandemia es una de las grandes causas de este desplome. El coronavirus sigue causando estragos en el fútbol chino, incluso en en este 2022 que acaba de finalizar.

“Esta temporada ha sido dura”, comenta el defensa del Wuhan, Yaki Yen, que nació en Fuerteventura, a Diario AS. La primera fase la jugamos encerrados, sin poder salir del hotel. Después ya jugamos ida y vuelta normal, pero con muchas restricciones. Nos hacían PCRs todos los días y se hizo muy pesado…”. “Pero cuando cambiaron las normas de control hace un mes, todos los equipos han tenido muchos casos. Pasamos de la noche a la mañana de controles exhaustivos a ningún control. Eso ha afectado a la población y al fútbol. Nosotros fuimos a jugar a Dalian con 16 bajas. Al Shandong Taishan, nuestro perseguidor por el liderato, le dieron el partido por ganado en las dos últimas jornadas y a nosotros solo en la última después de que el rival no se pudiese presentar”, añade Pedro Morilla, que es optimista respecto a la situación de la pandemia en China: “Pienso que la situación va a ir a mejor. Creo que esto lo ha buscado para inmunizar a la población. Pasaron de una política de control de “COVID cero” la llaman allí, que cuando había un caso en una comunidad la encerraban tres o cuatro días hasta que hiciesen controles, a que no haya ningún tipo de control. Ha sido una gripe de dos, tres o cinco días, según cada persona”.

Esta situación es lo que ha facilitado al Wuhan Three Towns a pasar de ser un equipo de cuarta división a campeón de liga en cinco años. “Cuando yo llego en julio de 2019 como director deportivo, en este proyecto casi no hay primer equipo, es solo de cantera. Para potenciar al futbolista de Wuhan. Se mandaba a los chicos a Barcelona, se les federaba y volvían con mejor nivel”, dice Pedro Morilla, quien se hizo cargo del banquillo en julio de 2021.

“Es algo histórico que un recién ascendido gane la liga. En nuestro equipo, los extranjeros estaban en mejor forma que los demás extranjeros”, asegura Yaki Yen. “El reto era competir, adaptarte a la categoría. Continuamos con dos de los tres extranjeros que teníamos e incorporamos a tres más, porque en Primera te dejan tener a cinco. Y firmamos a varios futbolistas nacionales chinos que dieron ese salto de calidad a la plantilla. Ni mucho menos el objetivo era ser campeón, pero cuando estas a 10-12 partidos te das cuenta que la liga está entre tú y otro equipo Shandong”, dice un orgulloso Pedro Morilla. Levantar todas las medidas es lo que permitió al Wuhan Three Towns celebrar este título por todo lo alto. “Hay libertad total. La fiesta no fue en un partido oficial, pero sí fue ese mismo día, con más de 30.000 aficionados en la entrega del trofeo. Sin ningún tipo de restricción porque el momento de China es ese, ahora mismo la situación es muy parecida a la que vivimos en España, pero allí con un repunte de contagios tras levantar todas las medidas”, dice le técnico sevillano.