Xabi lleva poco con el chándal puesto. Apenas un puñado de entrenamientos. Sin tiempo para que los cambios se reflejen. Ya se vio contra el Al Hilal. Una nueva era con los mismos mecanismos. Ya lo resumió Courtois: “Hemos estado cuatro años con Ancelotti, aún tenemos sus automatismos”. Pero en un estreno tristón, hubo brotes de alegría. Uno de ellos fue la entrada al campo de Brahim. Enérgico. Con piernas para presionar, el elefante en la habitación de este Madrid, y para agitar. Con autonomía. Una receta que su fútbol lleva intrínseco. Ingredientes que gustan a Xabi.

“Es cercano y habla con todos. Lo que hablé con él se queda entre nosotros, pero estoy muy contento de que esté aquí”, sonrió Brahim. Unas palabras que reflejan una realidad. Hay sintonía. No es casualidad que la renovación haya pegado un acelerón en las últimas fechas. Como bien informó AS, el apretón de manos es prácticamente un hecho. Está acordada, a falta de perfilar los flecos finales y el anuncio. “Siempre he querido estar aquí. Triunfar en el Madrid. Y creo que lo estoy consiguiendo”. Y la idea de Xabi, y del Madrid, para con Brahim ha resultado fundamental. Es una pieza esencial. De futuro y presente.

Réditos

Porque su fútbol será capital durante la temporada... y durante el Mundial. Contra el Al Hilal salió reforzado. Generó dos ocasiones de gol, completó el regate que intentó y solo falló uno de los 18 pases intentó. Diez de ellos, además, en el último tercio del campo (el que más fue Valverde, con 15). En ese tramo final donde el Madrid buscó con ahínco las cosquillas saudíes. En los mejores minutos blancos. Auspiciados por una sociedad entre Brahim y Güler que dio mucho rédito ofensivo a Xabi.

No es un contexto sencillo el que tiene que manejar el malagueño. Pero nunca lo ha sido. No lo era cuando aterrizó tras brillar en Milán. Pero conquistó a Ancelotti. De jugar 37 minutos en las primeras seis jornadas de liga... a terminar siendo el Quinto Fantástico del Madrid. Con noches de tronío como su gol al Leipzig rumbo a la 15 o los tantos a City y Atleti en la última Champions.

Nuevo escalón

Con Xabi comienza en un escalón muy superior. Y en los primeros días lo ha reforzado. La competencia es feroz, pero Brahim lo afronta con motivación. Con ese leitmotiv que le mueve... y que tiene registrado: “Lo que parece difícil al principio, se vuelve fácil cuando trabajas y crees en ello”. Y él cree. Como Xabi en él.

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