Verón gana la guerra

Estudiantes se coronó con el Trofeo de Campeones en una final para el recuerdo. De la desolación en el primer tiempo a remontada en el descuento con doblete de Lucas Alario. El Pincharrata cierra un año y un mes para el recuerdo, tanto en el verde como en los despachos. El fútbol argentino tiene un nuevo campeón en su ya extravagante torneo, unas medidas muy criticadas por la directiva de la ‘Brujita’ Verón.

El exmandamás hizo acto de presencia en el Estadio Único de San Nicolás. Rodeado de su gente, de la afición, y lejos de las autoridades, fue testigo privilegiado del éxito de su club. La AFA le retiró el apoyo y, por ende, el poder. Ir en contra de los ‘suyos’ le ha costado todo, desde el puesto hasta el ostracismo, uno que tiene fecha de expiación (seis meses). Pero a la ‘Brujita’, fiel a sus principios, no dejó pasar la oportunidad para mostrarse en público. Ya lo hizo en el Clausura ante Racing y repitió ante Platense. “Morir de pie es mejor que hacerlo de rodillas”, debió pensar.

Reválida para el campeón

Tras un primer tiempo marcado por las faltas, infracciones y una lluvia de amonestaciones, el Calamar se adelantó primero. Al arranque del segundo acto Zapiola hizo soñar a los visitantes con un derechazo desde la frontal, un misil imparable para Muslera. El golpe pareció ser mortal. Estudiantes no entraba en el partido, hasta que Eduardo Domínguez sacó la artillería.

Con la salida de Alario todo cambió. La eterna promesa que nunca terminó por encontrar su lugar lo ha hecho en el Pincha. Una actuación, la suya, que se estudiará en la Academia del club como ejemplo de perseverancia y sufrimiento. Primero, en una jugada al 80′, con prolongación de cabeza de Pérez Fabricio, para batir a Losas. Platense no se recuperó del golpe, y encima lo peor estaba por llegar. Ya en el descuento, desde la pelota parada y con el guante de Edwin Cetré, el ex del Leverkusen escribió su nombre en la historia del Pincha.

Al grito de Verón

Estudiantes ya es el mejor equipo de la temporada en Argentina. No solo por hacerse con dos de los ocho títulos en juego (Apertura, Clausura, Trofeo de Campeones, Campeón de Liga, Campeón del año, Copa Argentina, Supercopa Argentina y Supercopa Internacional), también por las formas. Se cobra otra victoria en la guerra declarada contra la AFA, encabezada por Claudio Chiqui Tapia, y su despotismo. Una que tuvo su punto álgido en el famoso pasillo a Rosario Central tras su título “a dedo”, como el propio club afirmaba, “otorgado en los despachos y no en la cancha”.

Las claves subyacen en la propia administración del organismo, que no solo ha perdido peso a nivel continental -Brasil domina en la Libertadores, por ejemplo-, sino también a nivel económico. Por poner en perspectiva, mientras que el Pincharrata se embolsó ‘apenas’ 500.000 dólares por el Clausura hace algunos días, el ganador de la Copa do Brasil se llevará casi seis millones de dólares. Es decir, un 1100% o 12 veces más que su homónimo argentino.

El fútbol argentino vive un momento duro a nivel institucional. A los resultados económicos y deportivos se le suman varios escándalos en los que se ha visto involucrada la AFA -según Clarín, el presidente tiene varias investigaciones por corrupción abiertas en su contra-, incluso contra el propio gobierno argentino. Argentina, una fiesta en horas bajas.

¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí