Accidentado regreso de Neymar

Neymar volvió a vestir la camiseta de Santos. El esperado regresó del Príncipe se produjo en el partido del Paulistao ante Botafogo-SP. Vila Belmiro se llenó a la espera de un momento histórico para el Peixe, que busca momentos gloriosos como los que dejó el ‘10′ en su primera etapa. En este primer partido fue capaz de dejar algunas acciones brillantes y prometedoras de cada a los siguientes compromisos. También sufrió un par de faltas que pusieron en peligro sus renqueantes tobillos. Al final, un empate gris que sabe a poco y ensombreció la fiesta.

El primer tiempo no dejó demasiado a rescatar. Santos llevó la iniciativa en todo momento pero evidenció grandes problemas a la hora de generar ocasiones de gol. En cambio, Botafogo necesitaba poco en sus incursiones para plantarse en los metros final.

Hubo poca pegada y tuvo que ser Guilherme, el mejor de los locales con su poderoso desborde, quien provocase un penalti poco antes del descanso. Tiquinho Soares lo transformó y adelantó al Peixe. En ese momento Neymar iniciaba su calentamiento en la banda. El momento esperado estaba cerca.

La espera no se alargó más. A la vuelta del descanso Neymar estaba listo para su reestreno. Tomó el brazalete de capitán y volvió a sentirse futbolista de Santos. Aunque a los 30 segundos la mística se diluyó cuando recibió un pelotazo en la entrepierna que lo dejó tendido en la cancha.

A los tres minutos de ingresar el partido sufrió una falta realmente dura que le torció el tobillo derecho. Le costó la amarilla al infractor y el partido se caldeó. Cuando apenas se llegaba al minuto 51 Neymar cayó derribado una vez por otra falta que conllevó tarjeta al rival.

Los jugadores de Botafogo querían frenar a toda costa a Neymar y el acoso y derribo fue constante. Con el paso de los minutos el ‘10′ entró en calor y dejó los primeros grandes destellos con regates y con una acción individual que terminó con un gran disparo cruzado directo a gol que sacó el arquero.

Santos mandaba pero no se mostraba contundente. Ni siquiera en la pelota parada, donde generó peligro sin resultar preciso. Quien no perdonó fue Botafogo. Alexandre Jesús ya había mandado un remate al travesaño y poco después anotó de cabeza a la salida de un córner.

El equipo de Neymar se puso manos a la obra para buscar el triunfo pero ni siquiera la expulsión de Wallison a los 71 minutos inclinó la balanza a su favor. Erraron ocasiones una tras otra. Tiquinho, Guilherme, el propio Neymar... Ninguno fue capaz de anotar.

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