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SELECCIÓN ESPAÑOLA

Las ‘locuras’ de Vilda funcionan

Volvió a aprobar con nota ante Países Bajos. Esta vez no hubo revolución, pero acertó con las pinceladas: Mariona de titular y Salma de revulsiva.

Wellington
Las ‘locuras’ de Vilda funcionan

Jorge Vilda volvió a aprobar con nota en los cuartos de final ante Países Bajos. Un nuevo partido en el que el plan del seleccionador funciona a la perfección. Esta vez no hubo revolución, pero acertó con las pinceladas. Como la de meter a Mariona de titular, y Salma de revulsivo. Puesto por puesto va perfilando un equipo muy completo, conjugando a veteranas y noveles. Sacando máximo rendimiento al equipo.

Portería: Cata Coll

El tema de la portería de España en el Mundial es el más llamativo. Llegaba con Misa reivindicándose desde la salida en octubre de Paños y Lola. Parecía un puesto intocable. Sin embargo, se ha dado la vuelta a la tortilla. La última en llegar es la primera. Cata ha demostrado por galones en los partidos ante Suiza y Países Bajos que está perfectamente preparada para ser la portera de La Roja. Además de una seguridad que parece inquebrantable, su dominio con los pies le hace aún más completa. Eso ayuda a que la Selección pueda adelantar líneas, tener la defensa unos metros más adelante. Es Can Barça y conoce perfectamente los movimientos que tiene pensados Irene Paredes y Laia Codina.

Defensa: Laia y Oihane

En la defensa también ha habido una progresión. Ha habido cambios, unos obligados y otros por decisión técnica. El primero fue el de las centrales. Irene Paredes es la fija, pero con la lesión de Ivana se quedó sin pareja de baile. Primero se probó a Rocío y finalmente se ha quedado con Laia Codina. Una de las claves de esta decisión por la catalana es los automatismos que tiene con Paredes, con la que entrena a diario en el Barcelona. Además, Laia tiene una característica que no tiene el resto: la velocidad. Es más rápida, lo que ayuda a liberar a Irene de tanta tarea defensiva. La guipuzcoana, con Laia a su lado, no está tan fijada atrás y puede avanzar metros. Algo que se le da muy bien, por cierto. Iniciar la jugada desde atrás.

En los laterales también ha habido modificaciones. Olga por la izquierda y Ona por la derecha, ese esquema parecía intocable antes de comenzar el Mundial. Pues no. Ona, como ella misma admite, está más acostumbrada a jugar por la banda izquierda y se ha visto en los dos últimos choques que rinde mejor. Para la derecha Vilda ha optado por Oihane, una jugadora más limitada que Olga en ataque, pero con más seguridad en tarea defensiva. Ideal para un choque de eliminatoria. Ese plan no podrá usarlo ante Suecia, ya que la vasca está sancionada. Volverá Olga.

Centro del campo: asentamiento de Tere Abelleira y Jenni (fuera Alexia)

Teresa Abelleira, uno de los aciertos de este Mundial. La gallega es la pieza que le faltaba a Vilda. Ha cubierto a la perfección ese puesto 6 que estaba sin dueño (45 recuperaciones). Destreza con el balón, combinación con Aitana y Jenni (88% de pases completados). Incluso superioridad en los duelos defensivos aéreos a pesar de no tener una altura destacable. Otro de los puntos fuertes de la centrocampista del Real Madrid son sus aberturas de campo. Pases en largo medidos que ofrecen más verticalidad -si cabe- a esta España (21 ocasiones).

Jenni cumple siempre donde esté, pero su intervención desde esta posición más retrasada saca a la mejor Jenni. Calidad infinita de toque de balón, lo guarda y lo aguanta como nadie. A falta de Alexia, están la madrileña y Aitana para dar una versión sobresaliente del juego español. Siempre al pase corto. Al pie. Siempre hacia el área. Con verticalidad, haciendo daño al rival.

Delantera: Todo. Salma

En el ataque funciona todo. El overbooking con el que llegó España al Mundial está sacando mucho fruto. Todas cumplen con su función, sea de titular o de suplente. El staff tiene a las atacantes más que enchufadas. Lo de Salma ante las neerlandesas fue de manual. Salir para romperla con una de sus carreras y cumplir con el gol más importante de la historia de España, por el momento. Esther como punta haciendo un trabajo en la sombra que ayuda a sus compañeras a tener huecos, a ser mejores. Alba adaptada completamente al juego por la banda. Y Mariona. Lo de la mallorquina fue el gran acierto en los cuartos. Cogió el protagonismo con el balón, no hacía nada sin inteligencia. Por la banda, por el interior. El balón pegado a su pie. Asociándose a la perfección con el centro del campo. Se desfondó.

Fue otro notable de Vilda. Una dura prueba ante una potencia mundial. Fueron mejores en todo momento, y cuando el equipo cayó en la prórroga, supo llevarlo de nuevo arriba. Y así certificar por primera vez estar en unas semifinales. Otra masterclass del seleccionador.