FINAL COPA DEL REY | ATHLETIC- RCD MALLORCA
Yuri Berchiche: “Cambio esta Copa por todos los otros títulos que tengo”
“La afronto mejor conmigo mismo. Creo que se va a ver a otro jugador. Me llega a nivel personal en el mejor momento”, señala el ex de PSG.
Yuri Berchiche (Zarautz, 34 años) se rodó en el Bernabéu para adquirir de nuevo su habitual potencia física de cara a la final de La Cartuja. La clave ante el equipo de el Vasco Aguirre la dibuja: “Ser igual de agresivos y de intensos en Sevilla que en San Mamés”. Confía en el bloque del Athletic: “Pese a su edad les veo muy maduros a los más jóvenes del equipo y lo están demostrando”. Se siente en su mejor momento personal: “Puede ser un broche de oro en mi carrera”, advierte el lateral izquierdo, recién renovado con un 1+1 en Bilbao. Canjea sus cuatro títulos con el PSG (Liga, Copa de Francia, Supercopa y Copa de la Liga), su campeonato de Segunda con el Eibar, y su Supercopa con el Athletic por alzar en Sevilla la Copa como rojiblanco este sábado.
¿Cómo afronta Yuri Berchiche esta final?
Puede ser un broche de oro en mi carrera. Cambiaba, y lo digo sinceramente, ganar esta Copa por todos los otros títulos que tengo. Ganar una Copa con el Athletic sería algo especial y lo quiero ganar por compañeros que lo llevan intentado mucho tiempo como De Marcos o Muniain. Me hace mucho ilusión. Es con lo que más sueño y ojalá se haga realidad.
¿Puede significar el partido de su vida?
Sí, sí. Creo que sí. Cambiaría todo lo que tengo por este título. El broche de oro a mi carrera. En caso de no hacerlo creo que me voy a ir con la sensación de que me va a faltar algo.
¿Nota el cariño de la calle cuando le hablan de esta cita?
Sí, muchísimo. Yo que voy todos los días al parque por la tarde con mis hijos estamos rodeados de padres y niños y te contagian esa ilusión que ellos también tienen por ganar esta Copa. Nos lo merecemos todos, la ciudad, el club y ojalá se haga realidad y podamos disfrutarlo todos juntos el jueves.
¿El Athletic tiene mucho que perder y el Mallorca que ganar?
Para mí ninguna. Sé que la gente piensa que tenemos que ganar porque somos favoritos, pero para mí no hay favorito. Hay mil detalles que se ponen a tu favor o en tu contra. Vamos a tener que jugar con la tranquilidad que venimos haciendo en casa, pero en Sevilla. El Mallorca llega en una línea ascendente, en un buen momento, con la salvación prácticamente cerrada y eso te libera. Ellos van a jugar más sueltos ahora que la semana pasada. Ellos quizás tiene menos que perder que nosotros, pero lo vamos a afrontar como una final, como siempre.
¿Nota la diferencia de la parte de la plantilla más veterana respecto a la más joven de afrontar esta final?
No, la verdad que a mis compañeros jóvenes les veo con mucho entusiasmo, con muchas ganas de que llegue el día, con mucha energía todos los días. Nos contagia mucho al resto. Esa energía es un valor incalculable. Y nosotros transmitirles a ellos que estén tranquilos, que lo vivan como un partido más sabiendo que no lo es, que es de vida o muerte, pero que dentro de eso hay que estar tranquilos. Pese a su edad les veo muy maduros y lo están demostrando.
¿Después de todo lo que ha pasado tras la pandemia, esta final es todavía más bonita para usted?
Sí, es cierto, sí. Mis dos antiguas finales llegaron en mi peor momento personal de mi vida, momentos jodidos. Esta vez lo afronto de diferente manera, mejor conmigo mismo. Creo que se va a ver a otro jugador. El sentirte mejor contigo mismo hace que rindas mejor en el campo. Son rachas que se pasan y ahora estoy feliz de poder afrontar esta Copa. Me llega a nivel personal en el mejor momento.
¿Qué aprendió de esas finales perdidas y cuál es la clave para este sábado en La Cartuja?
La verdad que poco, no sabría decirlo. Fueron días jodidos. Peor fue la de la Real, que lo pasamos muy mal y ganarle al Barça era complicado. Estaban en buen momento. Ganas experiencia en jugar finales. Tenemos unos cuantos con finales jugadas, cosas que el Mallorca no. Eso juega a nuestro favor. La clave es ser nosotros mismos, ser igual de agresivos, de intensos en Sevilla que en San Mamés, el mismo bloque. Esa va a ser la llave.
La Copa ha marcado su carrera como su gol en Granada. ¿Tiene una espina clavada?
Sí, por supuesto. Con decir que cambiaría todos los títulos que tengo por esta Copa, creo que está dicho. Son cinco finales entre Supercopa y Copa, ganamos una Supercopa y fue sin nuestro público. Primero quería vivir una final como la del sábado, con nuestro público. He visto vídeos y yo no lo he podido hacer. El siguiente paso sería ganarla. Pero todo son supuestos, lo que hay que hacer es salir al campo e intentar ganarlo.
Marcó dos goles al Mallorca hace poco, acaba de renovar, tiene la posibilidad de alzar una Copa. Parece que los astros se alinean...
Sí, ojalá sea el mismo partido que en casa, que ganamos medianamente fácil, marcado en estrategia rápido, pero va a ser difícil. El Mallorca tiene un bloque muy sólido y nos lo va a complicar más.