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CÁDIZ

Indignación en el Cádiz tras la eliminación copera

El árbitro del encuentro Hernández Maeso no llegó a consultar a los equipos el aplazamiento del duelo al considerar que la pelota se movía con facilidad.

ARANDA DE DUERO, 07/12/2023.- El defensa del Cádiz Jorge Meré (i) se lanza por el balón ante el jugador de la Arandina durante el partido de segunda ronda de la Copa del Rey que Arandina CF y Cádiz CF disputan hoy jueves en el estadio El Montecillo, en Aranda de Duero. EFE/Paco Santamaría
Paco SantamaríaEFE

El Cádiz y sus aficionados todavía no se explican que el Arandina-Cádiz se disputase en la piscina que fue el césped del estadio El Montecillo. La explicación que recibieron los clubes es muy sencilla a ojos del estamento arbitral: Hernández Maeso, árbitro del encuentro, consideró que la pelota circulaba con normalidad tras inspeccionar el terreno de juego y no llegó a preguntar a ninguno de los equipos sobre un posible aplazamiento. Hecho que indigna el Cádiz y como aseguró Sergio en rueda de prensa “Si fuésemos otro equipo, este partido no se habría jugado”.

Por mucho que la eliminación copera se quiera olvidar en el Cádiz, sigue coleando en el club amarillo por muchos motivos. Caer derrotado ante el último clasificado de Segunda RFEF no deja de ser un bochorno para un equipo de Primera División, y la mala imagen dada por el equipo de Sergio González, donde hubo varios futbolistas estuvieron a un nivel muy bajo, es la principal causa de ello.

Sin embargo, como se pudo ver durante todo el encuentro, el estado del césped imposibilitaba jugar y el duelo tenía que haber sido aplazado. Así lo consideraron todos menos el árbitro del encuentro Hernández Maeso que ni siquiera preguntó a los dos equipos por esa posibilidad al considerar que la pelota botaba y corría con cierta normalidad. Es cierto que el equipo arbitral salió a valorar un posible aplazamiento del duelo una hora antes del mismo, pero no vio los enormes charcos que había en las zonas de los banquillos, lo embarrado de las áreas y los agujeros en el centro del campo. Botó el esférico con mucho acierto, o mucha fuerza, en la única zona del campo que no estaba anegada porque mojado estaba todo.

Las imágenes del duelo no dejan lugar a dudas: el Arandina-Cádiz no se tenía que haber jugado. El balón se quedaba clavado en el 80% del campo, los jugadores se resbalaban en acciones sencillas e, incluso, algunos se tenían que quitar el agua de dentro de los oídos. El peligro de lesión era más que evidente menos para Hernández Maeso. Iturralde González, exárbitro de Primera División, aseguró en Carrusel: “Este partido no se puede jugar y tiene que ser suspendido”.

El puesto de Sergio no peligra

La eliminación copera ha sido un duro golpe para el Cádiz que venía de jugar dos buenos partidos ante Mallorca y Celta. Lo cierto es que el equipo del Nuevo Mirandilla no gana desde el 1 de septiembre, pero el puesto de su entrenador Sergio González no corre peligro.