Ibáñez, Herrando y Oroz, en la memoria del Athletic

Tres nombres propios de Osasuna descollan en la memoria del Athletic a cuenta de la cita que el destino les une de nuevo la próxima semana en los octavos de final de la Copa del Rey en San Mamés: Pablo Ibáñez, que fulminó a los leones en la última comparecencia del KO, Jorge Herrando, central que estuvo en su órbita como posibilidad para ocupar el rol de cuarto central hace dos veranos, y Aimar Oroz, por el que Ibaigane pujó, junto al Girona, en julio y agosto pasado sin alcanzar un entente por unos 10 millones.

La última eliminación resultó esquiva para los leones en la campaña 2022-23. Los rojillos, pilotados por Jagoba Arrasate, ganaron el partido de ida en El Sadar por 1-0 en marzo de 2023, con con gol de Ze Abde, y sellaron el pasaporte para la gran final en un 1-1 en la vuelta de San Mamés el 4 de abril. Iñaki Williams adelantó al Athletic, pero Pablo Ibáñez, recién ingresado a la cancha, resolvió el empate de la eliminatoria en la prórroga con un golpeo mordido desde fuera el área enmudeciendo a La Catedral.

Osasuna, sin embargo, cayó con las botas puestas la final ante el Real Madrid el 6 de mayo de 2023 en La Cartuja por 2-1. Ahora, el equipo navarro vuelve al escenario en eliminatoria a partido único con Ibáñez en la retina. Curiosamente, su club negocia con el centrocampista, primo de Hugo Rincón, para renovarle sin que se adivine por ahora un acuerdo. Por Herrando se negoció hace dos veranos valorando el Athletic abonar unos dos millones por el joven zaguero, pero las negociaciones se torcieron finalmente y amplió su contrato en Pamplona.

Por su parte, Oroz renovó finalmente este verano por el club navarro hasta junio de 2029, aumentando a 30 millones su cláusula, subiendo su status salarial. Osasuna no quiso rebajar el precio de su blindaje para convertirle en su futbolista franquicia. En medio de ambos, el Athletic sí ataba a Adama Boiro como lateral izquierdo de largo recorrido que militaba en Osasuna Promesas abonando su cláusula de 2 millones. Valverde está contando con sus prestaciones para darle un respiro a Yuri Berchiche.

Antecedentes

El Athletic ha eliminado a Osasuna en tres de los cuatro cruces que han enfrentado a ambos equipos en el torneo. La única vez que siguió adelante el equipo navarro fue precisamente la última, hace dos temporadas, en una ronda de semifinales que se decidió en la prórroga.

Osasuna ganó en El Sadar en la ida por 1-0 con un gol de Ez Abde. En la vuelta, en San Mamés, Iñaki Williams mandó el partido al tiempo extra y en el minuto 116 un gol de Ibáñez metió en la final al conjunto de Arrasate.

Esa eliminatoria ha sido la última que ha perdido el Athletic, ya que la pasada campaña superó seis rondas para llegar a una final que ganó al Mallorca en los penaltis y en la actual ha dejado en la cuneta, la pasada semana, a la UD Logroñés. En las tres anteriores ocasiones en las que Athletic y Osasuna se enfrentaron en Copa, todas a doble partido, fue el cuadro rojiblanco el que siguió adelante.

La primera se resolvió en los cuartos de final de la edición de 1956. El Athletic encarriló la eliminatoria ganando en Bilbao por 4-1 (Maguregui 2, Markaida y Mauri/Vila) y sentenció con un 2-2 en el desaparecido campo de San Juan (Vila y José Glaría/Mauri y Markaida).

Ese año los jugadores dirigidos por Ferdinand Daucik acabaron ganando el trofeo tras imponerse en la final al Atlético de Madrid. En 1961, en primera ronda, el conjunto bilbaíno cayó por 1-0 en Pamplona con un gol de Fusté y remontó en San Mamés (2-0) con los tantos de Zorriqueta e Iturriaga, el segundo a siete minutos del final.

La última ocasión en la que el Athletic dejó fuera a Osasuna fue en los octavos de final de la temporada 2008-09. En la ida, disputada en El Sadar, Fernando Llorente niveló en el 92 el tanto marcado en el 83 por Walter Pandiani y en el choque de vuelta dos tantos de Igor Gabilondo e Ion Vélez dieron el pase a los rojiblancos.

Fue una temporada histórica la protagonizada por los futbolistas los entrenados por Joaquín Caparrós, que devolvieron al Athletic a una final de Copa 24 años después ofreciendo noches para el recuerdo en La Catedral como la inolvidable semifinal frente al Sevilla.