“El fútbol es cabrón, pero se veía que Pimi llegaría a la elite”
Ballesté, Uri, Torras y Costa, ‘niños’ del técnico del Sevilla en La Masía, juegan en la UE Olot: “Xavi ganará trofeos, pero que no sea esta Copa”.
Olot se sitúa en el interior de Cataluña, unos 50 kilómetros al noroeste de Girona. Esta localidad de alrededor de 40.000 habitantes y su equipo de fútbol se engalanan con la Copa del Rey para recibir al Sevilla después de haber protagonizado ya la machada de eliminar al Córdoba en los penaltis (sigue el partido en directo en As.com). Actual 14º clasificado en el grupo 3 de Segunda RFEF, la UE Olot olvida sus problemas ligueros y sueña con otra gesta ante un entrenador que conocen muy bien cuatro de sus futbolistas: Pol Ballesté, Robert Costa, Uri González y Albert Torras fueron modelados por Xavi García Pimienta en La Masía, como otros cientos de jugadores en las casi dos décadas que el ahora técnico sevillista dirigió en la cantera del Barcelona. Solo algunos de ellos alcanzaron la elite.
El guardameta Pol Ballesté, de 29 años, llegó a rozar el éxito, pues incluso jugó con la Selección española Sub-17 antes de que una enfermedad de crecimiento lastrara su carrera. Luego se vio obligado a emigrar al Sur (Málaga, Cádiz, Granada, Badajoz) para reencontrarse en Olot hace algo más de cinco años. Pimienta le disfrutó dos años en el Barça, como cadete y juvenil. “Con Xavi tuve una relación espectacular. Luego nos hemos enfrentado estando yo en otros equipos y él, en el Barça B. El fútbol es tan cabrón, perdón por la palabra, que cuántos jugadores y entrenadores que parecían el nuevo Messi, Cristiano o Guardiola se han quedado por el camino. Pero Pimi valía y lo ha acabado demostrando”.
Al mediocampista Albert Torras, de 28 años, le usó Pimienta habitualmente como Falso 9 en el juvenil culé. Aquello le valió para fichar por el Wolverhampton inglés en 2013: “Entonces estaba de moda el falso 9 en el Barcelona, con Cesc Fábregas, y yo metí bastantes goles. Luego llegó la llamada de Wolves. Pimi es una persona superexigente pero muy cercana, y tengo buenos recuerdos de él. Seguro que acabará ganando algún trofeo allí, pero que no sea esta Copa, porque eso signifique que lo eliminamos. Mis tíos viven en Sevilla, en La Alameda, y son sevillistas. Mi primo va fardando de que voy a jugar contra ellos”.
Uri González, mediocentro, tiene 32 años y nunca ha salido del fútbol catalán. Tras militar en las inferiores barcelonistas pasó por Gavà, Sabadell, Europa y AE Prat. Desde 2023 juega en Olot. “Aparte de ser un tío que dominaba el ADN Barça, tenía mucho carácter. Se le veía con condiciones para llegar más arriba. En el Barcelona es difícil entrenar al primer equipo, así que hizo bien marchándose. Le fue muy bien en Las Palmas y ahora en Sevilla tiene faena, pero saldrá adelante”, afirma Uri sobre el técnico nervionense.
Ballesté vivió el sainete copero del Madrid con Cherishev
Pol Ballesté era el portero que defendía los tres palos del Cádiz hace algo más de 10 años, el 2 de diciembre de 2015, cuando un Real Madrid que visitaba Carranza ganó 1-3 en la ida de dieciseisavos de Copa pero quedó eliminado por la alineación indebida del ruso Denis Cheryshev, que arrastraba una sanción desde el Villarreal. Ballesté lo recuerda con detalle: “Fue una noche espectacular. Nosotros estábamos jugando y la afición cadista cantaba el nombre de Cherishev en la grada, pero al comienzo no sabíamos qué estaba pasando. Para colmo, fue Cherishev el que marcó primero, en el minuto 5. Yo creo que si no hubiera hecho gol, no se habrían dado cuenta, Pero se pusieron a mirar estadísticas y vieron que no podía jugar”.
“Aquella noche actuaban en el Madrid futbolistas como Isco, que marcó dos goles, Jesé, Lucas Vázquez, Casemiro... Alguna parada hice, pero tampoco tuve mucha faena. En los tres tantos suyos poco pude hacer. El Cádiz era equipo fuerte de Segunda B, teníamos jugadores de Primera y Segunda. Les competimos bien. Me llevé la camiseta de Kiko Casilla... Y nos clasificamos gracias a aquel error. La verdad es que nos quedamos con la ilusión de jugar la vuelta en el Bernabéu, claro, con esa miel en los labios, aunque en octavos me pude enfrentar también al Celta de Vigo”, relata el guardameta de la UE Olot.
