CACEREÑO - REAL MADRID | CARLOS ORDÓÑEZ
Carlos Ordóñez: “El Real Madrid nos va a cubrir el presupuesto de temporada o temporada y media”
El presidente del Cacereño analiza en AS la histórica visita del Madrid al Príncipe Felipe, que ha duplicado su aforo (hasta los 14.000). “Intentamos llegar a 20.000, pero en tan poco tiempo es muy difícil”, reconoce.
“¿Cuándo salen a la venta las entradas?”. La pregunta, recurrente y ansiosa, poblaba las redes sociales y acribillaba el Whatsapp de Carlos Ordóñez (Cáceres, 2-10-1974), presidente del Cacereño, gran protagonista de los dieciseisavos de Copa del Rey. Su gesta ante el Girona le colocó el apelativo anual de ‘matagigantes’ y el sorteo en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas puso el lazo a su andadura en el torneo del KO. Llegaba el Real Madrid. Será el séptimo Primera que pase por el Príncipe Felipe. El día de los Inocentes terminó la espera para la afición. El club anunció los precios y apretó el gatillo para comenzar la venta. El objetivo, abarrotar un Príncipe Felipe con unos 14.000 espectadores en el graderío este 3 de enero (21:00 horas, La 1 TVE).
La hinchada respondió. Conseguido con holgura colgar el ‘no hay billetes’. Las colas rodeando el estadio cacereño, la prueba gráfica. Los cerca de 7.000 que alberga normalmente, duplicados gracias a unas gradas supletorias instaladas a todo tren. La ocasión lo merecía. Una gestión que Carlos Ordóñez realizó desde la distancia con su mano derecha, Juan Miguel Olmedo (vicepresidente), como brazo ejecutor. La preparación la han realizado los de Julio Cobos en Nepal, donde se plantó el equipo a una semana vista de la visita del Real Madrid para un viaje benéfico apalabrado hace meses. Pero el destino tenía un regalo navideño bajo la manga y el Cacereño cumplió con lo acordado. Tras su odisea nepalí, el más difícil todavía. Y desde allí atendió a AS Carlos Ordónez, peleando con un WiFi tambaleante y muchas, muchas horas sin dormir (”llevo 36 o así, pero es por una buena causa”).
José Ramón Alonso de la Torre, articulista cacereño, emparejaba, en una de sus columnas en ‘Hoy’, el duelo ante los de Ancelotti con “las visitas del Cordobés, Franco e Induráin”. Días donde Cáceres fue capital informativa a nivel nacional. También pasó por el Príncipe Felipe Mark Knofler y sus Dire Straits el 29 de agosto de 1992. Aquello fue el ‘Concierto del Siglo’. El Cacereño-Real Madrid será, sin duda, el ‘Partido del Siglo’.
Lo primero, enhorabuena. Supongo que tendrá el teléfono ardiendo desde el sorteo.
Imagínate. Estoy todavía con 200 o 300 mensajes sin contestar. Cuando tengo tiempo contesto, me vuelven a entrar... (ríe). También pensando en todo lo que hay que organizar (la entrevista se realizó el pasado martes), estando a miles de kilómetros de distancia, estoy nervioso. Aunque con Juan Miguel (Olmedo Rubio, vicepresidente del Cacereño), que está allí, estoy hablando continuamente y lo tiene bajo control. Pero hay muchísimas cosas que hacer.
Quien iba a pensar cuando planearon el viaje a Nepal que jugarían con el Madrid una semana después...
Así es. Estaba planificado hace mucho tiempo y no podíamos echarnos atrás. Había un compromiso por nuestra parte y de la Fundación. No era lo mejor para nosotros ahora mismo, pero hemos ido hacia adelante con el tema. Hay que terminar esta aventura lo mejor posible y empezar a trabajar. Yo en la supervisión y los chicos a descansar y a prepararse.
¿Se esperaba a Emilio Butragueño en el aeropuerto? ¿Qué les dijo? ¿No le sorprendió que su rival de Copa se marchara a Nepal a una semana del partido?
Coincidí con él en otros sorteos, allí en la Federación. No me dijo nada, supongo que estaría sorprendido. La gente que no conocía este acuerdo, que es muy importante para el club de cara al futuro, entiendo que les pueda sorprender. A ellos les puede venir bien, aunque no creo que ellos necesiten algo así para hacer un buen partido. Ni tampoco es excusa para nosotros. Vamos a jugar con todo un Real Madrid. Plantar cara será muy difícil. Nos conformamos con dar la cara y si suena la flauta, sería la leche. No digamos imposible, porque no no hay nada imposible en fútbol, pero sí muy difícil.
¿Qué supone para el club el enfrentamiento ante el Madrid? En Prensa somos mucho de hablar de que al Cacereño le tocó ‘El Gordo’...
Sí, toda la ciudad de Cáceres está en una nube. Todos entusiasmados, nerviosos por el tema de las entradas. Nos preguntan a diario 40.000 veces. No sólo en Cáceres, en toda Extremadura. Es impresionante lo que está moviendo. El tema del viaje a Nepal junto con el partido del Madrid nos está haciendo a aparecer en prensa de muchos países. Parecemos un club de Primera División (ríe). Estamos en una nube, disfrutando al 100%.
Algo que preocupa mucho es ese tema de las entradas. Ya no por el precio o el cuándo se podrán adquirir, sino cuántas. ¿Cómo ha sido el intento de disparar el aforo?
Se está encargando Guelo (Juan Miguel Olmedo). Hemos conseguido llegar a las 14.000 aproximadamente. La idea inicial era llegar a las 20.000. El problema es que en tan pocos días y en estas fechas es muy difícil contactar con gente y que se comprometan a montar la grada supletoria hasta ese número que nos hubiera gustado. Intentaremos meter el máximo posible, pero por desgracia no podremos llegar a 20.000.
Entiendo que habrá locura en la ciudad. ¿Qué impacto económico puede tener la visita del Madrid en el club? ¿Puede hablar de cifras?
El impacto económico... Para nosotros, aproximadamente nos va a cubrir una temporada o temporada y media, lo que va a cubrir todo el movimiento del partido. A parte de los ingresos que se obtengan, tampoco somos un equipo con un presupuestazo. Tenemos presupuesto de mitad de tabla en el grupo un poco más. No es que vayamos a poner las entradas a 1.000 euros, sino que, al ser un presupuesto modesto, cubrimos temporada o temporada y media.
¿Habrá prima si hay machada?
Algún detalle habrá que tener. Seguro que tendrán regalo para compensar ese esfuerzo. Entre todos hemos arrimado el hombro, pero quienes lo han logrado sobre el césped han sido los jugadores y el cuerpo técnico. Algún regalo seguro que viene bien ahora que tenemos los Reyes a la vuelta de la esquina.
Antes de seguir en materia Real Madrid, me gustaría preguntarle por el partido del Girona. No fue una victoria accidental. Trataron de tú a tú a un Primera...
Lo definiste perfectamente, fue un partido de tú a tú. En ningún momento se podía diferenciar qué equipo era de Primera y quién de Segunda RFEF. Les plantamos cara, supimos sufrir y defender y aprovechar las oportunidades. Dejamos el listón bien alto. Incluso me atrevo a decir que se podían haber ido con uno o dos más. Está claro que dimos la talla como un equipo de igual categoría.
¡Y después de recuperar el césped a contrarreloj! Tuvieron que aplazar el partido ante el Coria...
Sí, después de tantísima lluvia, el césped estaba bien visualmente, pero en el campo tenía muchísima humedad. Estaba muy blanco el terreno de juego. Como no podíamos meter ninguna máquina para drenar el campo, tuvimos que hacerlo manualmente, pinchando el césped mediante barras y haciendo que esa humedad desapareciese cuánto antes. Hay que reconocer que el campo no estaba al 100%, pero estaba en condiciones para jugar. Y más después de la enorme cantidad de litros (la borrasca Efraín hizo estragos) que habían caído en Extremadura esos días.
Me han ‘chivado’ que no se le caen los anillos si tiene que coger la cortadora de césped y ayudar a los operarios...
Sí bueno, soy la empresa que lleva el mantenimiento del césped. Soy el encargado, soy el que normalmente corta siempre el césped antes de los partidos. Me gusta estar al pie del cañón y que el terreno de juego esté siempre en las mejores condiciones posibles. Para ver un buen partido y para que la afición disfrute de un terreno de juego que estaba imposible tiempo atrás.
“Soy el que normalmente corta siempre el césped antes de los partidos. Me gusta estar al pie del cañón”
¿Le preocupa en qué estado estará para recibir al Real Madrid?
No. Antes de venir a Nepal ya había dado las pautas a seguir. Va un equipo a realizar un pinchado con máquina, que ya sí que es posible, para airear y abonar. Si no se avecina otro Efraín, espero tener el césped mucho mejor que para el partido contra el Girona.
El fútbol ficción no existe, pero no puedo no preguntarle un resultado.
Me gustaría hacer otro como el día del Girona, un 2-1. Lo firmaba ahora mismo. Lo que tengo claro es que no voy a decir que vamos a perder. Luego veremos qué ocurre. Haremos un partido para que no sea un resultado muy holgado, por lo que un 2-1 es un buen resultado.
Cuando llegó al club, la situación económica era muy complicada, ¿se esperaba llegar hasta aquí y en estas condiciones?
En noviembre hice cuatro años, es mi quinta temporada. Entré con la 2018-19 ya empezada. No sólo le sé yo, sino toda la afición, que el Cacereño estaba en la UVI. Y actué como actúo con cualquiera de mis negocios. Empezar a reducir gastos y tratar de sanear y sacar ingresos de todas partes. Han sido cuatro años muy duros. Gracias al apoyo de mi gente hemos logrado tirar para adelante. Hemos crecido con paso firme. Dios está arriba y ha visto el trabajo que hemos hecho y se ha acordado de nosotros y nos ha echado una buena mano.
Me hablaba de que tienen un presupuesto de mitad de tabla, pero si ganan el aplazado se colocan segundos. ¿Qué objetivo deportivo se marcan para esta segunda vuelta?
Nuestro objetivo es intentar jugar playoff. Llevamos años ahí arriba. Hemos jugado Copa del Rey los últimos años y este año queremos seguir jugando playoff. Jugar de nuevo Copa del Rey es una experiencia muy bonita. Fue un acierto por parte de la Federación. A todos los clubes modestos nos ayuda y no solo económicamente, también para crear esa ilusión y generar más socios. Es tan bonita la competición, que la gente termina haciéndose socio.
“Me gustaría dedicarle todo esto a mi padre. Hace ya 12 años que falleció y era un madridista nato. Se lo dedica principalmente a él, porque estaría orgullosísimo de mí”
Por último, ¿alguna pregunta que le gustaría responder y que no le han hecho nunca en ninguna entrevista?
Pues se me viene una rápido a la cabeza. Si me gustaría dedicarle los triunfos y el llegar a donde hemos llegado a alguien. Y en primer lugar, sería a mi padre. Hace ya 12 años que falleció y era un madridista nato. Se lo dedica principalmente a él, porque estaría orgullosísimo de mí. Estaría entusiasmado y eufórico de que el equipo de su hijo jugase con todo un Real Madrid y que me viese en fotografías al lado de Emilio Butragueño, que era su ídolo. Desde aquí quiero dedicarle todo lo que he conseguido a él, que desde arriba me ha dado fuerza. También a mi mujer, hijas y mi madre. A toda mi familia, pero especialmente a él.