SUPERCOPA | REAL MADRID 4 - BARCELONA 1
1x1 del Real Madrid en la final: Vinicius, el príncipe de Riad
Segundo hat trick del brasileño con el Madrid, una noche en la que trituró al Barça. Actuaciones inmensas de Kroos y Tchouameni. Ya hay portero: sorpasso de Lunin a Kepa.
Fue un rapapolvo en el desierto. Una de esas noches en las que uno de los dos equipos parece jugar varias marchas por encima del otro. Ser más fuerte, rápido y duro. Tener un títere en sus manos. Impulsado por un Vinicius de matrícula de honor, el Madrid trituró al Barcelona. El brasileño firmó una de esas veladas mágicas de blanco, autor del segundo hat trick que marca con el equipo de su vida. Fue un canto coral casi perfecto, dirigido por la sensacional batuta de Kroos y la seguridad de Tchouameni (sale muy reforzado de este partido). Por si no fuera suficiente, ya hay portero: sorpasso de Lunin, confirmado también para el derbi de Copa.
Titulares
Lunin: uno de sus mejores partidos con el Real Madrid. Estrenó los guantes con una mano cambiada a Lewandowski y, a partir de ahí, relució una enorme seguridad. Por abajo a Ferran, por alto a centro de Gündogan y firme, a trallazo de Lamine Yamal; nada pudo hacer para detener el obús de Lewy desde la frontal. Gran partido. Jugará el derbi de Copa y, salvo patinazo, será el portero titular de aquí a final de temporada. Nota: 8.
Carvajal: su Supercopa es de sobresaliente alto. Tras cuajar un auténtico recital frente al Atleti (gol y dos asistencias), firmó otra noche para enmarcar. Fiable atrás, donde debía lidiar con la electricidad de Balde y preciso arriba. Su pase a Rodrygo en el segundo gol es una delicatessen. Ha empezado el 2024 a un nivel espectacular, de mejor lateral derecho del mundo (al menos, por estado de forma). Nota: 9.
Rüdiger: cuando Nacho dejaba caer en rueda de prensa que era un placer jugar con él, porque “siempre está enchufado”, se refería a actuaciones así. Ni un solo error en la salida de balón, imperial al corte y sobresaliente por alto. Nota: 8.
Nacho: necesitaba un partido así, repleto jerarquía y seguridad. Lewandowski decidió bailar con él, en vez de con Rüdiger, con la expectativa de sacar partido de los balones aéreos, pero incluso en esa faceta Nacho le fue un auténtico dolor de cabeza. El capitán anduvo rápido en los repliegues y acertado en los robos. A este nivel, tranquiliza de cara a lo que queda de temporada. Ha cumplido uno de los sueños de su infancia: levantar un título, como capitán, con el Real Madrid y, encima, contra el Barça. Una foto inolvidable para un chico que lleva defendiendo el mismo escudo desde los 11 años. Nota: 9.
Mendy: tuvo menos incidencia en ataque que frente al Atlético, centrado en echar el candado. Su partido fue notable, sólo enturbiado por el mal despeje en el gol de Lewandowski: cabecea hacia la frontal, algo terminantemente prohibido. Más allá de esa acción, inutilizó tanto a Ferran como a Lamine Yamal. Aquello de “defensivamente es el mejor lateral izquierdo del mundo” puede haberle motivado. Nota: 8.
Tchouameni: partidos como este le suman muchos puntos en el pulso con Camavinga. Con el balón rozó el 90% de acierto en pases y apenas falló dos envíos largos, pero es que sin balón fue el muro que el Madrid fichó del Mónaco. Impenetrable, insertándose a la perfección entre los centrales para ayudar a frenar a Lewandowski y sin arriesgar más de la cuenta en las entradas. Nota: 9.
Kroos (81′): su partido rozó la perfección. Excelso en el juego, siendo el metrónomo del equipo en las basculaciones y transiciones. Se jugó al ritmo que quiso, cuando quiso y como quiso, cuajando un impresionante 98% de acierto en pases. A este nivel es absolutamente indiscutible. Pero es que fue una noche especialmente sobresaliente en defensa, donde hizo tándem con Tchouameni y estableció una muralla en la medular. Nota: 10.
Valverde (86′): cuando Ancelotti dijo en rueda de prensa que los planteamientos del rival, a veces, condicionan los tuyos, se refería a la situación de Valverde, pues al meter Xavi un cuarto centrocampista (Pedri), jugó más internado de lo habitual, reforzando la sala de máquinas... aunque eso supusiese renunciar a galopadas por banda. Hizo lo que requería el equipo y lo hizo bien, jugando con seguridad y acompañando las transiciones cuando el contexto lo permitía, como en el cuarto gol del Madrid, que nace de una carrera por la derecha y un cambio de banda suyo. Nota: 9.
Bellingham (86′): con el equipo centrado en buscar balones a la espalda de la defensa, pasó más desapercibido de lo habitual, pues la línea de tres cuartas partes de campo es la principal víctima de ese planteamiento. Pero como un buscavidas, halló la forma de apoyar los ataques en la manera de la posible, aunque no fuese bajo el cenital de estrella que le acompaña. Un partido más discreto de lo habitual, pero porque lo normal en él estaba siendo la excelencia. Nota: 8.
Rodrygo (76′): se desgañitó en el trabajo físico, sin parar de hacer desmarques a la espalda de la defensa y recibiendo entre el central y el lateral, donde los rivales dudan y se descolocan. Un partido de norme inteligencia que supo culminar con un derechazo a la red en el 4-1. Antes fue el autor de la asistencia a Vinicius en el segundo gol, otra jugada que nace de una buena carrera a la espalda de Christensen. Nota: 9.
Vinicius (81′): fue una de esas noches mágicas y que refuerzan lo que es, un Galáctico de pleno derecgo. Trituró al Barcelona a base de desmarques a la espalda y esprines de infarto. Su chispa fue, sencillamente, inalcanzable. A los 7 minutos hizo el primero tras regatear a Iñaki Peña y marcar a portería vacía; a los 9′ firmó el segundo tras un regalo de Rodrygo y, en cuanto Martínez Munuera señaló penalti, dio un paso al frente y asumió la responsabilidad. Gol y segundo hat trick con el Real Madrid (el anterior fue en un 6-0 al Levante, la 2021-22). Ya en la recta final provocó la expulsión de Araújo. Un partido mayúsculo, de matrícula de honor. Nota: 10.
Suplentes
Brahim (76′): el rato que tuvo, derrochó la electricidad que tanto le caracteriza. Y tuvo oportunidades para firmar hasta su gol, pero le falló la pegada. Su principal problema es que quienes están por delante, son insentables, pero está a un nivel excepcional, llamando a las puertas de La Roja. Nota: 7.
Camavinga (81′): sólido atrás, centrado en no cometer errores. Buena actuación en la recta final. Nota: 6.
Modric (81′): Arabia lo ovacionó, recordándole que, si en el futuro quiere, le esperan. Apenas tuvo tiempo de brillar, pero el cariño de Riad se lo lleva en la mochila. Y dará que hablar. Nota: 6.
Ceballos (86′): apenas tuvo oportunidad de intervenir. Nota: s. c.
Joselu (86′): apenas tuvo oportunidad de intervenir. Nota: s. c.
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