Paradoja total en Nervión: la UEFA sí ‘cazará’ los goles fantasma
Ante Las Palmas, el VAR decidió que no había entrado del todo un tiro de En-Nesyri. Igual que en Vigo el sábado. En Champions sí que existe la tecnología.
En inLukebakio supera a su marcador y manda un preciso pase en profundidad que En-Nesyri remata delante de Álvaro Vallés. El guardameta de Las Palmas no acierta a detener del todo la pelota, que parece colarse sin remisión en su portería hasta que, de un manotazo, consigue despejarla sobre la línea. ¿Sobre la línea? El VAR decide que no hay gol mediante la visión de la imagen que deja unos centímetros de ‘la barriga’ del esférico sin entrar del todo. Pero los matemáticos no andan muy de acuerdo: la perspectiva y sobre todo, el frame elegido a la hora de valorar la jugada, pueden engañar.
Esto ocurrió en el Sánchez-Pizjuán el pasado domingo, con 0-0 todavía en el marcador. Mismos guarismos había en Balaídos entre Celta y Mallorca un día antes cuando, esta vez sí, Munuera Montero decidió conceder en un primer momento el gol a instancias de su asistente. Pero desde el VAR dictaminaron, tras revisar una imagen de perspectiva parecida a la de Nervión, que la pelota rematada por Bamba no había rebasado del todo la línea tras dar en el larguero. Rafa Benítez, entrenador celeste, se quejó amargamente después del partido: “Cuando le he dicho al cuarto árbitro ‘¿tendrán goal technology?’ y que mirase el reloj, me respondió que aquí no hay. Me he quedado alucinado. No podía pensar que la liga española no tenía la tecnología, por lo que sea”.
Tres días después, en una paradoja dificílmente explicable, en Nervión no podrá ocurrir lo mismo este miércoles ante el Lens porque en Champions sí que existe esa tecnología. En el mismo lugar, puede que la misma portería, la UEFA evitará que algo tan crucial como un gol, lo más importante en el fútbol, quede en el limbo por carecer de los instrumentos adecuados. La tecnología de gol avisa al árbitro a través de su reloj de si la pelota ha entrado completamente. Cuesta unos dos millones de euros en cada categoría, Primera y Segunda División. Pero los clubes de LaLiga consideran que la herramienta es demasiado cara y, además, no del todo fiable, no más que la cámara que ya tiene el VAR sobre la línea.
Los equipos piensan que los goles fantasma se dan apenas un par de veces en la temporada, algo que ha quedado en entredicho en apenas una jornada y pocas horas, las que fueron del Celta Mallorca al Sevilla-Las Palmas. Porque al campeonato le quedan todavía 33 jornadas y con bastante probabilidad, si no toda, seguro que existirá alguna otra polémica más con la entrada del balón. Fiable o no, mediante la tecnología adecuada no habría que pelearse por la perspectiva o el frame que elija una persona: sería la máquina, como esta noche en Nervión, la que ‘cazara’ los goles adecuados.