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Champions (Fase Liga) | Real Madrid - Salzburgo

Mbappé: “Lo que me pasó fue mental; culpa mía, de nadie más”

“¿Timidez? No, pero al Madrid se llega con humildad, no con exigencias”, dice, en una rueda de prensa con aura de líder. Autocrítico y mirando a Bilbao

Valdebebas
Mbappé: “Lo que me pasó fue mental; culpa mía, de nadie más”

Lo que me pasó fue mental. [...] Y en Bilbao me di cuenta de que ya no podía hacerlo peor. Fue ahí cuando me dije ‘vamos, no has venido a Madrid para jugar mal”, reconoce Mbappé, echando la vista atrás. A sus primeros meses. Cuando el balón no entraba, cuando le costaba encarar. Cuando se le señalaba una posible falta de carácter. “No fue timidez. Pero al Real Madrid hay que venir con humildad, porque es un equipo que ha ganado todo y no puedes llegar con exigencias, ordenando ‘pásame el balón’. No. Aquí se viene con el máximo respeto.... Y a trabajar”, responde. Una rueda de prensa sincera. Histórica. Pero sobre todo, una rueda de prensa con aura de líder.

Con mi gesto ante Las Palmas quería transmitir que estemos todos unidos. Entiendo los pitos, no hay problema, son normales después de cómo perdimos en la Supercopa; pero no perdamos la unidad”, añade. No le intimida la presión del Real Madrid (“soy el tipo de jugar que necesita esta presión”) y transmite que las críticas en Francia, por no ir a la selección en los anteriores parones, no le afectan: “Tú sabes cómo son allí (a un compañero periodista francés). Tengo ganas de volver en marzo; mi amor por la selección no ha cambiado”. Para terminar con un alegato en forma de autocrítica: “Estar aquí es siempre un sueño. Cada vez que tengo la oportunidad de jugar aquí, soy feliz. Incluso cuando no jugaba bien, lo estaba. Era mi culpa, de nadie más. Y ahora estoy mejor”.

Mbappé, en la sala de prensa de Valdebebas.
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Mbappé, en la sala de prensa de Valdebebas.EDUARDO CANDEL REVIEJODiarioAS

Rueda de prensa

―Suma 18 goles esta temporada... y estamos viendo a un grandísimo Mbappé. ¿Cómo está de confianza? ¿Cómo se encuentra?

―Me siento muy bien. Hace un mes... o mes y medio que estoy en un buen momento. Intento ayudar al equipo lo máximo que puedo y me siento con total confianza de cara al Salzburgo. Total confianza en mi juego, en el del equipo y en todos los madridistas que estarán en el Bernabéu.

―Ahora que está en su mejor momento: ¿Qué le dice a los críticos? ¿A quienes dudaban de Mbappé?

―(Sonríe) Nada, estoy muy tranquilo, es normal. Cuando eres un jugador como yo, con tantas expectativas, es lógico que la gente hable si no juegas bien. Puede hacerlo mal, pero no me lo llevo a lo personal. En el mundo del fútbol, cuando juegas bien, la gente habla bien y cuando lo haces mal, habla mal. Debes estar siempre tranquilo y concentrado en tu juego, en lo que puedes mejorar. Yo sabía que podía cambiar la situación, lo ha hecho y estoy muy feliz por ello, como por ayudar a mi equipo de la manera en la que lo he hecho en los últimos partidos.

―“En Bilbao toqué fondo”, dijo. ¿Cuánto mal lo ha llegado a pasar en estos primeros meses?

―Lo he pasado mal, porque soy un jugador que siempre quiere hacer más; dar el máximo por mí y por el equipo. Y cuando ves que no lo consigues, es normal que te afecte. Jugar aquí es una gran oportunidad, lo he dicho siempre. Pero yo sabía que estas cosas podían pasar y, como dije, Bilbao fue un ‘buen momento’, porque cambió mi mentalidad. Ya no lo podía hacer peor. Sólo podía mejorar. Y con ello, demostrar que soy un jugador de gran calidad, que puedo ayudar al Real Madrid.

―¿Pero qué ha cambiado en Mbappé? ¿Qué pasaba?

―Ha sido algo mental. De darme un golpe en el pecho y decir: tengo que hacer más. Yo estaba bien físicamente, contento con el grupo, pero debía dar más. Lo sabía. Y Bilbao fue un... bam. De decirme, ‘ahora es el momento de cambiar esta situación, no has venido al Real Madrid para jugar mal’. Y la he cambiado, pero toca seguir. Porque jugar bien un mes es fácil; lo que hay que hacer es jugar bien siempre. Y yo estoy listo para ayudar a mi equipo.

“Ahora toca seguir: jugar bien un mes es fácil, pero hay que hacerlo siempre”

Mbappé, en rueda de prensa

―Ese “sueño” de jugar en el Madrid... ¿Se ha llegado a ver superado en estos meses?

―Estar aquí es siempre un sueño. Cada día que vengo a Valdebebas, cada día que tengo la oportunidad y el honor de jugar en el Bernabéu y vestir esta camiseta. Vivo un sueño. Y soy feliz desde el día uno. Incluso cuando no jugaba bien, lo era. Porque sabía que la culpa no era del club, ni de los madridistas, ni de nadie; fue mía. Yo he sido muy feliz desde el día uno... y ahora estoy muy bien. He ganado dos títulos, jugamos bien y tenemos grandes retos en la segunda parte de la temporada. Todo está bien. La vida... intento aprender la cultura española. Es un poco diferente de la francesa, pero disfruto, me lo paso bien. Me gusta mi vida.

―¿El Madrid es el lugar más exigente en el que ha estado?

―Soy el tipo de jugador que necesita esta presión. El sentir que siempre tienes que hacer más. Ante el Celta hubo pitos... pero es normal. Cuando juegas en un club como el Real Madrid, tienes que ganar todos los partidos. Si pierdes una final de Supercopa de España, es posible que la gente luego pite. Y es normal. Nuestro trabajo es revertir esto. Y se hace ganando partidos, volviendo a hacer felices a los madridistas. Claro que fue una noche difícil la del Celta, porque encima íbamos ganando, cometimos errores y acabamos en la prórroga. Pero tuvimos la personalidad para vencer... y el domingo, igual. Empezamos mal, pero mostramos esa personalidad para cambiar la situación. Jugamos bien y ganamos. Esto es lo que quieren los madridistas.

Mbappé, en la sala de prensa de Valdebebas.
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Mbappé, en la sala de prensa de Valdebebas.EDUARDO CANDEL REVIEJODiarioAS

―¿Qué quería trasmitir a la grada con aquel gesto, tras el 1-1 a Las Palmas?

―Muy simple: que estemos todos unidos. Podemos entender a la gente que pita, no hay problema con eso, pero no perdamos la unidad. Porque tenemos aún muchas cosas por delante, faltan muchos títulos y necesitamos a todos los madridistas. A toda la gente, tanto de dentro, como de fuera del club. Y así, a escribir una nueva página de la gran historia del Real Madrid.

―“Era un problema de mentalidad”, dice. ¿Se ponía demasiada presión? Y otra: ¿Cómo ha vivido las críticas desde Francia, por no ir con la Selección?

―Yo pensaba mucho. Puedes verlo en los partidos. Era un momento de adaptación y pensaba demasiado: que si cómo hacer esto, que si moverme en el espacio, o si me acerco a la izquierda, a la zona de Vini, o a la de Rodrygo... y cuando piensas tanto, no juegas bien. Respecto a la Selección, no pasa nada. Tú eres francés (al compañero periodista) y sabes cómo son en nuestro país. Es así. No puedo cambiarlo, como no va a cambiar lo que pasa en Francia. Y claro que puedo entender la crítica, pero yo tengo muchas ganas de volver en marzo e intentar clasificarnos para la semifinal de la Nations (juega ante Croacia, el día 20). Mi amor por la Selección no ha cambiado. Pero, volviendo a lo de antes, creo que lo que tengo que hacer es pensar menos y jugar mi fútbol. Que es lo que estoy haciendo ahora. Y con lo que estoy disfrutando tanto.

―Ante Las Palmas jugó su mejor partido. ¿Ya se puede decir que Mbappé está al 100%? ¿Y cuál es su techo?

―Tengo el objetivo de hacerlo mejor, por el Real Madrid, en cada partido. ¡Así que espero que mi mejor partido sea el de mañana! Jugué bien ante Las palmas, pero tengo la sensación de que puedo hacerlo aún mejor, porque tengo calidad. Pero sobre todo confianza; en mí y en mis compañeros. Creo que podemos hacer aún más.

―Estos primeros meses se le ha visto algo tímido, sin el carácter que tenía en el PSG. Ahora lleva 18 goles y la expectativa se dispara: ¿Llegará a los 40?

―Tímido... yo no diría tímido. Nunca voy a ser un jugador tímido. Pero cuando llegas al Real Madrid, un club que lo ha ganado todo, tienes que venir con humildad. ‘Timidez’ no sería la palabra, sino ‘humildad’. Llegas a un equipo que viene de ganar la Champions y no puedes, el primer día, decir ‘eh tú, pásame el balón, este es mi equipo’. No. Así no funciona. Hay que tener el máximo respeto. Y por los goles... no me pongo límites. Si puedo hacer 40, haré 40. Y si puedo meter más, meteré más. El objetivo es convertir cada ocasión que tenga: si tengo tres, quiero meter tres. Y así será siempre será. Buscando el próximo gol.

“No puedes llegar a un campeón de Champions y decir ‘eh tú, pásame el balón, este es mi equipo’. Hay que tener el máximo respeto”

Mbappé, en rueda de prensa

―¿Cómo ha sido la semana en el vestuario, tras la derrota en la Supercopa (2-5)?

―Muy triste. Perdimos una final contra un rival. Fue una derrota... En el avión estábamos muy tristes. Pero con la sensación de que queda muchísimo por hacer, muchísimos títulos por ganar. Y fuimos listos, porque nos venía un partido de Copa y era muy importante ganar en casa, ante el Celta, un rival que no es fácil de tumbar. Claro que el de la Supercopa fue un partido muy malo, pero en el fútbol tienes que cambiar la mentalidad rápido y eso es lo que hemos hecho. Ganamos los dos últimos partidos. Y esperamos seguir mañana, ante el Salzburgo.

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