Los violinistas son un seguro
El Madrid ha conquistado las ocho finales en las que Casemiro, Modric y Kroos han compartido once inicial. La única derrota con ellos en plantilla llegó con el croata saliendo desde el banquillo.
Carlo Ancelotti tiene seis partituras en el horizonte que anhela bordar, la ruta del Sextete. La primera la interpretan sus chicos este miércoles en Helsinki y, como buen director de orquesta, apostará por sus violinistas de confianza. Si bien Camavinga (19 años), Valverde (24) y Tchouameni (22) son la sala de máquinas del futuro, jugarse un título con Casemiro (30), Modric (36) y Kroos (32) es hacerlo con red de seguridad. En las ocho ocasiones que han compartido once en una final, el Madrid ha salido vencedor. El Triángulo de las Bermudas no desafina cuando sube la temperatura.
Modric fichó en 2012 (por 35 M€, del Tottenham), Casemiro en 2013 (cedido del São Paulo en enero, primero, y ejecutando la compra de 6 M€ en verano, después) y Kroos en 2014 (25 M€ al Bayern), pero hasta 2015, cuando el brasileño regresó tras terminar de moldearse en Oporto, no se convirtieron en un centro del campo simbiótico e innegociable. 66 M€ para recibir 12 años de éxitos como retorno. Esa temporada comenzó su idilio con las finales y la víctima inicial fue el Atleti, en la Champions de Milán sellada en penaltis (1-1 en los 120′).
En la 2016-17, Zidane ganaba la Supercopa de Europa al Sevilla (3-2) sin Kroos y con Modric saliendo desde el banquillo, pero el trío recuperaba el protagonismo en la Duodécima ante la Juve (1-4) y el Mundial de clubes contra el Kashima Antlers (4-2). La pujanza de Isco obligaba al francés a cambiar el dibujo en ocasiones(del 4-3-3 al 4-4-2), como en la final de Cardiff o la de Kiev un año después. Caso similar al de Valverde en el presente. Fluctúa el esquema, pero ese Casemiro-Modric-Kroos permanece innegociable.
A por la novena
La Decimotercera también llegó con la CMK engrasando al equipo contra el Liverpool (3-1), así como la Supercopa de Europa y el Mundialito de esa 2017-18, donde cayeron United (2-1) y Gremio (1-0) respectivamente. El Barça sucumbió en la Supercopa de España, pero Modric no estuvo en el Camp Nou (1-3) y Casemiro salió desde el banquillo en el Bernabéu (2-0) . Y así llegamos al lunar, la única final que han perdido los blancos con el trío de cuerda en plantilla, la Supercopa de Europa contra el Atleti (2-4) de la 2018-19. Eso sí, tiene asterisco: Modric no fue titular. Lopetegui no quiso tirar del 10 hasta el 57′, pues apenas un mes antes estaba disputando la final del Mundial ante Francia y llegó justo.
Sin Case de titular ganarían el Mundialito al Al Ain, para retomar la senda en la 19-20 al superar al Atleti en la Supercopa de Yeda con los tres tenores saliendo de inicio una vez más. El curso pasado completaron ese pleno al ocho, recuperando el cetro de supercampeón nacional y con la 14ª como guinda. En las rondas previas, el músculo de Camavinga y Valverde y el oportunismo de Rodrygo reestructuró el equipo hasta sellar la remontada ante el City sin el alemán, el croata ni el brasileño en el campo, pero Ancelotti no tuvo dudas en Saint-Dennis y volvió a confiar en sus violinistas de seguridad. Sabe que no desentonan. Contra el Eintracht, Casemiro, Modric y Kroos buscan el nueve de nueve.