De la guerra, a la Champions
Hoy, en Polonia, el Dinamo de Kiev juega su primer partido oficial de este 2022 después de seis meses de amistosos por Europa. Tienen muchas bajas.
La tensión bélica continúa en Ucrania, pero los clubes no pueden aguantar más sin competir. Por ello, esta temporada ya se jugará y los equipos participarán en las competiciones europeas. Hoy le llega el turno al Dinamo de Kiev.
El equipo capitalino se enfrenta al Fenerbahçe en la segunda ronda de la fase de clasificación para la Champions. Ambos fueron subcampeones de sus respectivas ligas, pero en condiciones muy distintas. El Dinamo no pudo terminar la temporada porque Ucrania detuvo el fútbol a principios de diciembre para el parón invernal y, la misma semana que tenía que reanudarse, comenzó la invasión rusa.
Por motivos obvios, el partido se jugará en el estadio municipal de Lodz, en Polonia. Allí están ahora, pero desde abril han estado recorriéndose Europa para jugar un total de 15 amistosos. “Ahora somos como un campamento nómada. Las mudanzas constantes dejan huella e influyen. Pero en la situación actual del país no tenemos derecho moral a quejarnos”, dice el capitán Sydorchuk.
Deportivamente, tampoco está siendo fácil. Tsitaishvili, Gerson Rodríguez, Fran Sol, Eric Ramírez y Vitinho se han marchado. La FIFA permite que los jugadores extranjeros se marchen cedidos hasta que termine el conflicto. Evidentemente, fichar les ha sido imposible. Pero de estas cesiones han querido volver para arrancar la temporada Dubinchak, Kedziora, Verbic, Supriaha y Vanat.
“Es muy difícil no pensar en lo que está pasando en Ucrania. Estamos constantemente en contacto con lo militares”, comenta Syrota, central del equipo. Él insiste en que juegan por todos los que están luchando en la guerra, como hizo a principios de junio con la selección junto a sus compañeros Buschan, Zabarnyi, Popov, Karavaev, Sydorchuk, Shaparenko y Tsygankov. Los únicos de la plantilla que han jugado un partido oficial en este 2022.