GRUPO F | SHAKHTAR - REAL MADRID
Benzema ensaya para el Clásico
Vuelve el francés ante el Shakhtar, el equipo menos ofensivo del torneo, para rematar el pase del Madrid. Mudryk y Sudakov, en el escaparate.
El duelo de Varsovia ante el Shakhtar le ofrece un doble premio al Madrid: la clasificación para octavos (con una victoria será matemática) y tres cuartas partes de la primera plaza, que presuntamente le evita el bombo de los leones, y dos jornadas europeas de descanso para sus titulares más fatigados, ventaja que no le ofrecerá la Liga a estas alturas. También le da a Benzema la posibilidad de reaparecer y recuperar sensaciones con vistas al Clásico, la final de octubre (sigue el partido en directo en AS.com).
Ese duelo ante el Barça extremará la rotación de Ancelotti. Quizá pare a Vinicius, que ha jugado todos los partidos casi al completo y supera ya los 1.000 minutos esta temporada, y llegue la primera titularidad de Asensio. Valverde y Alaba son los otros dos jugadores más castigados y también podrían tener descanso. Como Modric, en cuidados intensivos para los partidos más importantes. A cambio, regresarán Kroos y Mendy, suplentes en Getafe, y quién sabe si Hazard, desaparecido en los últimos cinco partidos. También parece una buena ocasión para tirar de Lucas Vázquez y Nacho, que ha perdido un puesto en la rotación con la llegada de Rüdiger.
En el búnker
El Shakhtar, aun mermado por los efectos de la guerra (el equipo estaba afectadísimo por el último bombardeo sobre Kiev) y pese a recibir 35 disparos en el Bernabéu, es segundo, con opciones de seguir vivo y con la posibilidad de lucir ante el campeón dos futbolistas de futuro: Sudakov y Mudryk.
Sudakov, mediocentro de 20 años, debutó ante el Madrid hace dos años. Fue en Valdebebas, con triunfo ucraniano por 2-3. “Es el mejor talento al que entrené. Podría jugar en el Barça o en el City”, escribió en redes sociales Fernando Valente, que le tuvo a sus órdenes en las categorías inferiores. Su imagen, refugiado en un búnker junto a su novia embarazada, se hizo viral al comienzo de la guerra. Titular indiscutible, ha disputado ya 36 partidos con el Shakhtar y tres con la selección absoluta. Gran parte del juego del equipo pasa por él.
A Mudryk, de 21 años, se le conoce como el Neymar ucraniano, aunque los analistas del país le encuentran un mayor parecido con Vinicius: diestro, juega en la banda izquierda, driblador vocacional (promedió diez regates por partido en su última liga con un 50% de éxito), explosivo en su cambio de ritmo, estupendo en el fútbol al espacio y con el remate como punto débil. Pruebas de todo ello dejó en el Bernabéu. A diferencia de Sudakov, Mudryk no es un producto puro de la cantera del Shakhtar, sino de la intuición de sus ojeadores. Nació en Krasnograd, una ciudad al sur de Jarkov muy castigada hoy por las tropas rusas. Sus primeros pasos fueron en el Metalist, en 2010. En 2014 se incorporó al Dnipro y en 2016 llegó a la academia del Shakhtar. Tenía 16 años y con 18 Paulo Fonseca le hizo debutar en el primer. Después fue cedido sucesivamente al Arsenal de Kiev y al Desna.
Desde el verano de 2021 es pieza clave, con mejores registros en el pase que en el remate. Ha dado 15 asistencias desde su llegada, cuatro en un mismo partido ante el Lviv la campaña pasada y tres ante el Metalist en esta. En cambio, solo ha firmado cuatro goles, dos de ellos en la temporada actual.
Inglaterra pone la vista en Mudryk
El Sevilla pensó en él el año pasado. También el Leverkusen y el Brentford, al que rechazó: “Con todos los respetos, es un equipo de mitad de la tabla que no compite por Europa y para mí lo más importante es la Champions”. Ahora sus pretendientes ingleses han subido de nivel: Everton, Liverpool y Arsenal, que está dispuesto a pagar 50 millones cuando su precio de mercado es de 15. Amante de los tatuajes y extremadamente religioso, su técnico del curso pasado, el italiano De Zerbi, adivinó en él un crack mundial. “Si no le llevo al más alto nivel, lo consideraré un fracaso personal”.
Mudryk ya ha jugado ocho partidos con la selección ucraniana y el director deportivo del Shakhtar, el croata Srna, asegura que “después de Mbappé y Vinicius, es el mejor de Europa en su puesto”.
Le necesitará hoy un Shakhtar con peores estadísticas que resultados. Es el equipo que menos ataques registra en la Champions (solo 51) aunque ha metido seis goles y el que menos córners lanza. En remates, solo el Copenhague está por detrás y ningún portero se ha visto obligado a hacer tantas paradas como Trubin. Su porcentaje de posesión en Europa baja diez puntos respecto a su Liga. Con todo, Jovicevic mantendrá un equipo muy similar al que cayó en el Bernabéu ante un Madrid que lidera el índice de precisión en el pase de toda la competición (92,3% de acierto). Una precisión que le faltó estrepitosamente en el remate hace una semana.