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El récord de Riazor salva la cara a un playoff desangelado
Riazor reunió en el Deportivo-Linares a 26.177 espectadores, récord absoluto de Primera RFEF. Los otros cuatro partidos juntos sumaron 5.980 aficionados.
La decisión de la Federación de establecer una sede única para el playoff de ascenso a Segunda está levantando mucha polémica. Por un lado, por el aspecto deportivo, pese a que el campo se considera neutral, el hecho es que algunos de los contendientes juega con el factor cancha a su favor. El caso más claro es el Deportivo, pero la evidencia podía ser mayor si el Celta B no se hubiese quedado fuera del playoff en el último suspiro. De haberse clasificado, los celestes jugarían en Balaídos y el Racing de Ferrol en A Malata y no en Vigo, como finalmente ha sucedido. El convenio entre Federación Española y Gallega es, además, por tres temporadas.
El factor deportivo está muy abierto al debate, ya que no es, ni será, la primera vez que un equipo juega la final de Copa, Champions o Mundial en su propio estadio. Lo sabe perfectamente el Depor, con la conquista de la Copa en 2002 ante el Real Madrid en el Bernabéu en el famoso Centenarizo. Lo que tiene muy poco debate es el perjuicio que está causando a las aficiones, muy limitadas para los desplazamientos por el coste y la distancia. Algo agravado por la decisión de jugar semifinales y final de domingo a domingo en lugar de miércoles-domingo, como estaba inicialmente previsto.
La suma de estas decisiones ha tenido como consecuencia imágenes de estadios prácticamente vacíos y desangelados. Así ocurrió en el Racing de Santander-Andorra, que eligió al primer campeón de la nueva Primera RFEF con 374 aficionados en las gradas de A Malata. Cifras similares se repitieron en el Albacete-Rayo Majadahonda de Balaídos (450) y Villarreal B-UD Logroñés en A Malata (495). Más digna, aunque no a la altura del partido, fue la entrada en el Racing de Ferrol-Nàstic por el desplazamiento de unos 600 seguidores catalanes y la cercanía de una afición ferrolana que sigue indignada porque no se jugase en A Malata. La entrada fue de 4.661 espectadores, concentrados sobre todo en la grada Río Bajo. Colorido verde que contrastaba el desierto que se vio en la retrasmisión en Tribuna Baja y Alta.
Habrá nuevo récord el sábado
El contrapeso a este fiasco lo puso Riazor, donde sí hubo una espectacular entrada en el Deportivo-Linares. El estadio coruñés congregó a 26.177 aficionados, récord absoluto en la historia de la tercera categoría del fútbol español. Esta cifra superó los 22.222 que abarrotaron El Sardinero para ver el ascenso de su equipo ante el Celta B. El tercer partido con más publico fue el que enfrentó a Depor y cántabros en A Coruña, que pese a jugarse en miércoles reunió a 20.878 espectadores.
Después de eliminar de forma brillante al Linares (4-0), el Depor jugará la final del playoff ante el Albacete. Los manchegos deben comunicar este lunes antes de las 20:00 horas el número de entradas que solicitan, que podrían estar en torno a las 3.000. Sean esas, 2.000 o 4.000, lo que está garantizado es que Riazor cubrirá los 32.490 asientos de los que dispone y establecerá un nuevo récord en el fútbol de bronce. Una imagen que a buen seguro contrastará con la otra final que disputarán Nàstic y Villarreal B, ya se juegue en A Malata o en Balaídos.
Un chollo económico
La aportación del Deportivo a esta Primera RFEF no está siendo solo de imagen, también lo es económica. Calculando el precio medio de las entradas para el playoff (oscilan entre 18 y 26 euros), con el Deportivo-Linares se ingresaron unos 575.000 euros. Entre la final de campeones y las otras tres semifinales, algo más de 132.000. El Deportivo-Albacete, que se llenará, se puede ir a los 720.00 euros. El Nàstic-Villarreal B es todavía una incógnita. De estos ingresos, cada club recibe el 20% del partido y Federación Española y Gallega se reparten el otro 60%. Contundentes cifras, a lo que se añaden los pinchazos en las retransmisiones con Footters antes de empezar el delirante conflicto televisivo. El club coruñés sumó el 30% de las visualizaciones globales, es decir, de los 40 equipos del Grupo I y Grupo II juntos. Sin duda, la Federación está mucho más contenta con el Depor en Primera RFEF que el club coruñés con todo lo que ha vivido en esta categoría.