Villar sobre Rubiales: "Como ser humano no me gusta que sufra"

Ángel María Villar, expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), afirmó este jueves en La Nucía (Alicante) que no le gusta ver sufrir a ningún ser humano, en alusión al actual dirigente federativo, Luis Rubiales, como consecuencia de las últimas polémicas en las que se ha visto envuelto. Villar ha hecho estas declaraciones en el Foro Campo a Campo, organizado por el Club Información y celebrado en la Seu Universitaria de La Nucía, en el que ha repasado su trayectoria como jugador y dirigente junto a los periodistas Raúl Ruiz y Toni Cabot.

El expresidente no quiso entrar a valorar las polémicas de Rubiales, con el que confesó llevarse "extraordinariamente" y dijo que dirigir la RFEF es "difícil porque es un cargo sometido a crítica". "Ahora estoy viendo al ser humano que está sufriendo y estoy con él. Como ser humano no me gusta que sufra", dijo Villar, quien aseguró que no ha dado consejos a Rubiales porque cree que no está "capacitado para darlos". El exdirigente confesó, sin embargo, que él no hubiera llevado la Supercopa fuera de España y desveló que durante su mandato tuvo la opción, pero la rechazó.

"En aquel momento, pese a tener ofertas de montones de millones, queríamos proteger al aficionado y que viera a su equipo con los nuevos fichajes en agosto", dijo. "Ahora, sin embargo, el fútbol ha dicho que sí. Son tendencias y parámetros diferentes", explicó Villar, quien restó importancia a la petición de Gerard Piqué a Rubiales de formar parte de la selección olímpica.

"Nunca me pasó, pero ojalá hubiera pasado, pero entonces nadie quería ir a la olímpica", desveló el ex presidente, quien presumió del oro y la plata logrados bajo su mandato en la RFEF. Villar, que fue repasando el pasado y la actualidad deportiva según le mostraban imágenes, admitió que le hubiera gustado que el Real Madrid fichara a Kylian Mbappé y se mostró convencido de que el club madridista hizo todo lo posible por contratar al francés. "No ha podido ser, qué le vamos a hacer", lamentó Villar, quien contó durante el acto numerosas anécdotas sobre su relación con dirigentes del fútbol español.

El exmandatario felicitó al Real Madrid por la Liga de Campeones y la Liga, que para él es el torneo más importante y que tiene "más mérito porque se gana en 38 jornadas", a la vez que negó sus simpatías por el Barcelona, ya que recordó que procede de un época en la que el conjunto madridista tenía muchos simpatizantes en Bilbao. Villar indicó que Javier Tebas, presidente de LaLiga, tiene un gran conocimiento del fútbol profesional y es una persona "trabajadora y preparada", si bien admitió haber tenido "discrepancias" con él.

"Debe ser bueno para el fútbol profesional porque le han reelegido en varias ocasiones y los directivos del fútbol hoy en día hacen relojes suizos de alta precisión", apuntó. Además, agradeció al Rey emérito y a la Casa Real el trato que siempre tuvo hacia la RFEF y su presencia en las finales de la Copa y recordó que de las 20 acciones criminales en las que se ha visto envuelto ha sido absuelto en 19, si bien se preguntó: "¿Qué pasa ahora con mi salud, quién renueva el honor, mi patrimonio, mi trabajo y mi relación de familia?".

"Ahora me considero un hombre feliz y con tendencia a tender la mano al que me ha hecho daño. No hay que hacer leña del árbol caído. Hay que dejarle tranquilo", argumentó Villar, quien agradeció al fútbol "haber podido dedicarme a lo que me gusta y conocer a personas de diferentes culturas, idiomas, formas de pensar y religiones". "Puesto en la balanza lo bueno y lo malo, pesa hasta el centro de la tierra lo bueno", confesó Villar, quien se mostró orgulloso de haber contribuido a que los éxitos de la selección española "lanzaran a la calle a millones de personas".

"Algunas cosas hice mal, como no estar a la altura y tener una relación más fluida con los medios", apostilló Villar, quien relató su breve etapa en la prisión como "una buena experiencia dentro de una mala experiencia". "Ahora me pagan por no trabajar. Quiero vivir en paz y morir en paz", concluyó Villar, quien estuvo acompañado en el acto por Juan Manuel Asensi, excompañero de la selección, y José Ramón Betzuen, exjugador del Athletic Club.