Simeone sigue siendo el rey
En el Atlético esperan que Simeone regrese de las vacaciones más motivado que nunca. Tuvo momentos de debilidad, pero nadie duda de su liderazgo. Hay Cholo para rato en el Atlético.
Simeone sigue siendo el rey. El técnico argentino acabó cumpliendo los objetivos que le pidió el Atlético en una temporada complicada para el club madrileño. Desde la entidad entienden que había plantilla para haber peleado por el título liguero hasta el final, pero lo fundamental se logró: acabar en puestos de Champions en el campeonato liguero y entre los ocho mejores de Europa. Simeone, pues, sigue teniendo toda la credibilidad del mundo y liderará una campaña más al Atlético.
Eso no impide que desde el club sepan que el Cholo también tuvo algunas dudas a lo largo del ejercicio. Tras el año de la conquista de LaLiga aparecieron problemas internos que afectaron al grupo. Durante algunos momentos de la temporada pareció que el Cholo se tambaleaba, pero finalmente salió a flote. Muchos se apresuraron a buscarle sustituto, algo que volverá a suceder si pierde tres partidos seguidos. Desde el club se apeló a la unión de todo el grupo en los momentos complicados.
El Atlético jugará Champions por décima temporada seguida y eso es prioritario para la entidad. Justo en Liga de Campeones ofreció las grandes alegrías: triunfos en Oporto y Mánchester, ante el United. Y al City le tuvo contra las cuerdas. En competición europea, el Atlético respondió. No así en LaLiga, donde tuvo un bajón inexplicable si se ve desde fuera.
El equipo aburrió durante muchos encuentros, perdió puntos ante los conjuntos de abajo, cambió de sistema en numerosas ocasiones y cometíó errores que parecen ya crónicos: regalar una parte de los encuentros. Recibió más goles de lo costumbre y se mostró como un equipo demasiado vulnerable en defensa. Y algunos de sus jugadores clave no lograron el rendimiento esperado. Pero se sobrepuso a todo ello.
El Cholo sigue al frente de la nave y regresará de vacaciones más motivado que nunca. En la entidad le ven con las mismas ganas de siempre. Tiene el respaldo de la hinchada y del club y en la plantilla habrá algunos retoques. Se le dará esa frescura que necesita en algunos puestos. Con contrato hasta 2024, en el Atlético todos y todo se puede discutir. Menos al Cholo. Por lo menos de puertas hacia afuera. Una década después, la fe en el entrenador argentino es infinita.