Aprobados y suspensos del Espanyol: el juez del descenso
El equipo blanquiazul hizo un encuentro muy serio con buenas actuaciones de Nico Melamed, la línea de tres centrales y Diego López.
Diego López: Trascendental en su último partido a la espera de renovar por el Espanyol. A sus 40 años, mantuvo unos nervios de acero, sacó dos paradas de mérito (la primera en el tramo inicial) e incluso adivinó el penalti lanzado por Jorge Molina. Seguro por arriba y con los pies, el metga gallego fue de lo mejor del Espanyol en Los Cármenes.
Aleix Vidal: Más centrado que en otros encuentros, arropado con David López cubriéndole la espalda, el lateral no desentonó en el lateral, subió la banda más comedidamente y combinó por dentro con criterio. El jugador catalán rindió al mismo nivel que su equipo.
David López: En esta ocasión, el central jugó en el costado derecho y no como líbero como ante el Valencia. La organización defensiva del Espanyol fue mejor, incluso también su salida de balón gracias en parte a un David que solo sufrió con Luis Suárez en algunos duelos uno contra uno.
Sergi Gómez: El central fue determinante en algunas acciones defensivas, como un cruce después de un regate de Uzuni que desbarató con su rapidez. Más tranquilo en un contexto complicado en Granada, el defensor blanquiazul ofreció la solvencia de la primera parte de la temporada.
Cabrera: El uruguayo fue quizás el defensor más vulnerable. Sufrió más por la izquierda y provocó el penalti con un mano que no pudo esconder después del centro. Solvente en el juego aéreo, cumplió al mando de un Espanyol muy competitivo.
Vilhena: El lateral holandés ha mostrado buen rendimiento en esa posición como defensa de cinco. Aunque le faltó velocidad en algunas de sus acciones, defendió bien y en ataque le dio profundidad al equipo con sus conducciones por dentro y sus centros por fuera.
Herrera: El venezolano regresaba al equipo titular después de su inocente expulsión ante el Alavés. El mediocentro jugó con Darder y ambos equilibraron el equipo. Herrera jugó bien de cara y repartió juego, aunque en ocasiones le faltó más intensidad defensiva.
Darder: Aunque probó algún lanzamiento e intentó filtrar pases al espacio a Puado o Embarba, el de Artà fue más importante en el juego de mediocampo que en la mediapunta, menos liberado por la presencia de Melamed por delante. De nuevo, sus acciones fueron las más destacadas de los blanquiazules.
Melamed: El mejor en la primera mitad. Hace más daño por dentro que por fuera. Dejó en evidencia a varios defensores del Granada con sus regates, incluso se atrevió a hacer un caño y a finalizar varias jugadas. En la segunda mitad pecó de individualismo en un contraataque en el que no vio a Puado, solo por el otro costado.
Embarba: El extremo jugó en una posición más centrada, aunque en ocasiones ocupaba el extremo derecho también. Se ofreció, lo intentó, incluso tuvo un remate que se fue desviado por encima del larguero. Le faltó acierto en regates y en pases, incluso un centro pasado desesperó a Puado y Vilhena.
Puado: Fue la punta de referencia ante la ausencia de RdT. El delantero fue más determinante entre líneas que en el área, ya que apenas pudo crear ocasiones pero en cambio ayudó a darle continuidad al juego. Trabajó defensivamente como el que más.
Wu Lei: El delantero chino presionó, se desmarcó y tuvo un remate de cabeza muy forzado. Contribuyó al punto sumado.
Dídac: Jugó unos pocos minutos y realizó una buena acción ofensiva.
Calero: Jugó los últimos minutos.
Melendo: Participó 20 minutos en los que no tuvo demasiada incidencia en el juego.
Warrick: Debut del juvenil, de solo 18 años, con dos acciones interesantes que Hernández Hernández le señaló falta cuando no era.