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Arechabaleta: "No nos podemos permitir bandos"

El exejecutivo de Vocento inició el proceso electoral en su nueva sede, a pocos metros de la de su contrincante Barkala. Aduce que este tiene 'etiquetas' y él no.

Arechabaleta, en su sede electoral
AIOL

Dos días después de la presentación oficial de la candidatura de Ricardo Barkala a la presidencia del Athletic, ha saltado al ruedo preelectoral Iñaki Arechabaleta (del barrio bilbaíno de Deusto, 63 años).Frente a su contrincante, que el martes habló en el hotel Carlton, el exdirectivo del grupo de comunicación Vocento se ha pronunciado en su sede electoral, en el mismo corazón de la ciudad, cerca de una de las zonas de más ambiente. El propio Barkala ha abierto también su oficina a pocos metros de esta instantes más tarde. Mientras, Ortuzar, presidente del PNV, no se ha mojado en las elecciones, aunque ya se sabe que el grupo jeltzale va con Barkala: "Votaré el mejor proyecto". Ha asegurado que el equipo rojiblanco es "algo muy especial que hay que preservar y mimar".

La puesta en escena de ambos no ha tenido nada que ver. Barkala, mucho más académico, con corbata y hablando desde un atril. Arechabaleta viste de forma más juvenil y desenfadada, con un micrófono incorporado desde la oreja, sin leer ni un folio y siendo muy expresivo con las manos. Ha estado escoltado por Iñaki Goirizelaia, que ha ejercido de rector de la UPV en dos ocasiones, y Marta Areizaga, que ha desempeñado labores de responsabilidad corporativa en Eroski y tiene conocimiento de las fundaciones desde su trabajo para Tubacex. En segundo plano se encontraban Iñaki Berriozabal y Mario Fernández, que sumarán desde el punto de vista de la abogacía. También el expresidente Arrate y el exvicepresidente Txomin Guzmán, en clara muestra de apoyo 

“Quiero que el Athletic sea muy profesional”, no deja de repetir. Arechabaleta ha empezado fuerte la campaña, dando donde más duele a su contrincante. Él si se desliga de sus quehaceres profesionales, no como un Barkala que quiere seguir al frente de la Autoridad Portuaria. “Hay alguna etiqueta que no se puede quitar. Yo no las tengo. En mi caso, he sido profesional del Grupo Vocento y punto. Me presento como Iñaki Arechabaleta, exjugador de fútbol y ejecutivo que deja todo para dedicarse cien por cien al Athletic. Mi vinculación con  un grupo de comunicación ha sido muy fructífera desde el punto de vista del conocimiento y la experiencia se acaba en el momento que voy a ser presidente del Athletic. Es más, Vocento no tiene ningún interés en el Athletic, cotiza en bolsa, tiene muchos negocios y sigue su vida independientemente del Athletic. La gente quiere enfrentar conceptos que son absurdos en mi caso, en el otro caso es un poco más difícil”. Lidera un equipo “con gente nueva, que no ha estado vinculada a la gestión del club, con un currículo profesional excelente”.  

Aduce que ha dedicado muchísimo tiempo a dar forma a su proyecto, visitando las canteras que considera más potentes en Europa en este momento: Red Bull, Benfica, Ajax y Leeds. También la del Genk. “Celta, Betis, Valencia y Villarreal nos han pasado en metodología, tecnología, recursos humanos y formadores, y eso no puede ser”. Su idea es firmar contratos por objetivos en la primera plantilla.  

“Vamos a sorprender, hemos trabajo tanto que no van a ser palabras, van a ser hechos”, lanzó con un acento convincente. Lo que más le mueve es la idea de cerrar filas: “He visto mucho bando y no nos podemos permitir bandos, somos tan únicos que no nos podemos permitir bandos. Si estamos en una trainera, todos tienen que remar en la misma dirección y muchas veces no pasa. Nos vamos a dejar la vida por conseguir que todos rememos en la misma dirección, seguramente es lo más importante de todo”. Todo esto le removió por dentro en la Asamblea, la que decidía la Grada de Animación. “Cuando se produce un enconamiento sufro, si algo tengo es corazón y si algo vamos a hacer es dejarnos la vida por unir al club... fuera los intereses personales, políticos e ideológicos, ya basta de estas peleas que lo único que nos hacen es débiles”. El resumen a modo de eslogan es este: “No tenemos ataduras. Eso es nuevo en el Athletic. Tenemos un proyecto ilusionante que nos lo va a comprar la masa social”. 

Y otro punto fundamental es el dinero. “Tenemos caja y vamos a ser ambiciosos”. Los números rojos de 32 millones de este ejercicio no le asustan. Se revuelve ante el concepto de “déficit estructural”, y “hay que hacer una gestión que racionalice gastos y sea capaz de hacer un modelo económico sostenible”. Considera que el club tiene “unos intangibles que no son explotados” y es favorable a tener la propiedad absoluta de San Mamés, cuando ahora es solo del 29 por ciento. 

“Emociona hablar con la gente de las peñas y queremos hacer un protocolo, un reglamento de las peñas, son nuestros brazos alargados a través de la geografía mundial, es necesario que pintemos mucho más en la geografía vasca”. En ese sentido, sostiene que el Athletic debe “ser influyente en el fútbol, recuperar peso en Madrid, tengo la ventaja de que me conocen allí y hay que capitalizarlo en el bien del Athletic”.  

En lo que sí coincide con Barkala, su rival en las urnas, es en pasar de puntillas por la reforma de Estatutos, que se vota en Asamblea el lunes: “Voy a ser muy escrupuloso en la decisión de cada compromisario no voy a influir con mi opinión en lo que es un voto democrático en la asamblea del lunes, me niego. El texto está muy trabajo por parte de la comisión y los compromisarios, que han estado muy activos. Hay una redacción definitiva, daré mi voto porque soy compromisario, pero soy respetuoso con lo que quiere hacer cada uno. Me parece un poco extraño que estemos en una precampaña con un proceso de elecciones y al de diez días tengamos una asamblea de unos estatutos que son las tablas de la ley. El proceso es mejorable”. Y frente a lo que manifestó el presidente de la Autoridad Portuaria, Arechabaleta no se ha reunido con nadie de CVC, y está de acuerdo con no recoger ese dinero como ha hecho Elizegi mientras haya dinero en caja.