Aprobados y suspensos del Pucela: Enganchados

El Real Valladolid sigue enganchado a la pelea por el ascenso directo tras imponerse a la Ponferradina haciendo bueno el tempranero gol de Iván Sánchez, que adelantó a los blanquivioletas antes de los 60 segundos, con una actuación en ascenso cuyo marcador fue aumentado con una genialidad de Monchu a la que Amir no supo responder. Pese a que los vallisoletanos no siempre dominaron como en el segundo tiempo, lo hicieron ante un rival que estuvo vivo bastantes minutos.

Masip: Dudó en el primer balón colgado, pero, en dos tiempos, sobre la línea paró el segundo servicio. La Ponferradina se acercó a su arco por momentos, aunque sin obligarle a parar demasiado. Rechazó bien con las manoplas el remate de Dani Ojeda.

Luis Pérez: Más allá del robo del primer tanto, poca incidencia en el primer tiempo, en el que él y Plata no se encontraron como acostumbran. En defensa estuvo bien, frenando las acometidas de Ríos Reina.

Joaquín: Contundente como acostumbra, sobre todo en los envíos aéreos, como El Yamiq, se vio obligado a moverse fuera de zona por las caídas para prolongar de Sergi Enrich y por las carreras de Agus Medina a esas acciones.

El Yamiq: Se atrevió con un disparo exterior en la primera parte. Como su compañero de fatigas, realizó numerosos despejes y se impuso en la batalla por el aire a los atacantes bercianos, que acabaron aburridos ante su superioridad.

Nacho: Muy exigido por las galopadas de Paris Adot y demasiado solo en algunas defensas. El carrilero berciano le exigió muchísimo, pero poco a poco se le fue imponiendo hasta ser incidente en acciones en el último tercio.

Roque Mesa: Dio casi tantos pases en la primera parte, 40, como los que promedia en Liga, 43,2. Todos esos toques, sin embargo, no sirvieron para dormir el partido, ni tampoco para llevar el balón arriba. Mejor con el 4-4-2.

Aguado: Aunque los datos arrojan un alto porcentaje de acierto en el pase (45 pases buenos de 47), lo cierto es que a veces se echó un poco de menos un poco más de control por su parte. Fue el sacrificado para naturalizar al equipo con el 4-4-2.

Iván Sánchez: Asomó en el balcón del área para hacer una genialidad muy de las suyas. Erró más acciones de las frecuentes en él en el primer periodo. Apareció a veces en el carril del '10' y estuvo unos minutos en banda derecha antes de ser cambiado.

Real Valladolid

• España

NoticiasEstadísticas

Plata: Se le quedó atrás un buen centro de Anuar en boca de gol. Arrancó bien en el segundo tiempo, asomándose a banda izquierda. Amir le rebañó el tercero, propiciado previamente por él mismo.

Anuar: Titular en el costado, que abandonó mucho para acompañar a Weissman. Ofreció un par de balones para resarcirse de la sensación de desconexión. Todo corazón, rescató algún balón por piernas, como el del 2-0.

Weissman: Vio puerta en un testarazo, pero el tanto fue anulado. Se cansó de lanzar desmarques que no siempre el equipo leyó. No pudo rematar bien un servicio servido por Nacho tras un gesto técnico de mérito.

También jugaron en el conjunto de Pacheta:

Monchu: Amplió distancias con un gol de pillo, ejecutando la falta al primer palo para sorprender a Amir en el primer balón que tocó. Con él sobre el tapiz, el equipo ganó en aplomo, además de su capacidad en la pelota parada.

Sergio León: Salió con revoluciones altas en su reaparición tras la sanción. Pero no fue egoísta, como demostró en un balón palmeado por Amir que buscaba a Weissman. Retorno prometedor.

Toni Villa: Casualidad o causalidad, Nacho encontró más continuidad cuando el murciano entró. El equipo le buscó en alguna transición al final, bien cortada por la zaga.

Janko: Entró para refrescar el costado derecho. Asomó en el último tercio en una ocasión, aunque se enredó con el cuero en los pies.

Kiko Olivas: Jugó los últimos minutos como sorprendente mediocentro.