Los números de Velázquez siguen siendo insuficientes
Estado depresivo en Vitoria porque, además, los rivales directos por la salvación sí que están sumando puntos en sus respectivos compromisos ligueros.
El que no corre, vuela. Salvo el Alavés y el Levante. Las victorias de equipos como el Cádiz en Barcelona, Elche en Sevilla o Rayo en el campo del Espanyol dejan al desnudo las vergüenzas de un Alavés que sólo acumula 25 puntos a estas alturas de la película. Los de Julio Velázquez tienen que recibir al Villarreal, Espanyol y Cádiz y viajar a Vigo y Levante. Quedan 15 puntos en juego.
Velázquez ha llegado a Vitoria con un discurso plagado de optimismo pero esas sensaciones no se corresponden con lo que se ve en el campo. El Alavés perdió en Pamplona (mereció el empate), ganó al Rayo en Vitoria (no tuvo que llevarse los tres puntos) y cayó en Mallorca (el reparto habría sido lo más justo). Acumula tres puntos durante su etapa, justo los mismos que ha merecido en los casi 300 minutos jugados bajo su batuta. Ha recibido tres goles y ha marcado dos.
Sumar un punto por partido te da la permanencia en caso de computar toda la campaña. Si consigues 38, son suficientes para seguir el año que viene en LaLiga pero, a estas alturas de la temporada, hacen falta de tres en tres. Se han perdido choques clave como el del Granada en Mendizorroza y el de Mallorca en las Baleares. Por el camino, eres testigo presencial de goles como el de Lucas Pérez que dio el 0-1 al Cádiz en el Camp Nou.
La afición está destrozada, convencida de que no hay nada que hacer. El club, oficialmente, sigue haciendo llamamientos al optimismo. La plantilla apela a las matemáticas y el entrenador, con un discurso que empieza a sonar a hueco, habla del convencimiento total de que se va a conseguir la permanencia. Las palabras, como dijo Laguardia, sobran. Lo importante son los hechos.