Fausto Omoigui
Si en enero y febrero el Racing cabalgó a lomos de un Pablo Torre que daba un recital por día, en marzo y abril son Tienza y Cedric los que tiran del carro


Son casos distintos
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Obviamente, no se puede comparar la calidad por centímetro cuadrado que tiene Pablo Torre con la de ningún otro jugador del equipo. Ni de Primera RFEF, probablemente. Es un futbolista con muchos años por delante, llamado a brillar en el fútbol de elite y que ya ha fichado por uno de los mejores clubes del mundo, pero hay que reconocer que a la extraordinaria marcha del Racing están colaborando muchos otros componentes de la plantilla. Y ahora, concretamente en el último mes, el rendimiento de Fausto Tienza y Cedric Omoigui está siendo impresionante. Lo del goleador, nueve goles en los seis últimos partidos, seis victorias, por cierto, está casi todo dicho con sus números, aunque habría que sumar su implicación en el inicio de la presión alta, otra de las claves. Lo del extremeño, puesto en duda al principio por su falta de sintonía con el balón (Romo solo le dio dos titularidades entre cinco suplencias de la 3ª a la 9ª jornada), ahora mismo es brutal: se come a los rivales por las patas. Bien secundado por Íñigo, defiende siempre hacia adelante y cuatro robos suyos han dado cuatro goles en los tres últimos partidos. Casi nada. Ya lo dijo Cedric, les ha venido muy bien el paso adelante que ha dado el equipo.
Con el rabillo nada más

Marcelo sin rizos
Javi Vázquez marcó ayer un golazo en Villaviciosa de Odón. Empalmó un zapatazo a la red, a la carrera, al primer toque y sin ángulo, que redondeó el marcador a lo grande. Buena noticia para un chaval que desprende optimismo allá por donde pasa. La mayoría de los aficionados no le han podido ver más que los pocos minutos que le ha dado Romo para cerrar los partidos, pero a los pocos que tenemos la suerte de ver los entrenamientos nos ganó enseguida el positivismo que desprende en cada acción. Y eso que tardó un mes en jugar un solo minuto desde que fichó por el Racing. Defender no es su especialidad, pero para arriba se va con descaro y con calidad. No se corta, tira bicicletas, caños, ruletas, centra bien y, ya se vio ayer, pega duro. Como Marcelo en sus buenos tiempos. ¿Dónde hay que firmar?
Canguros en Villaviciosa de Odón




