Aprobados y suspensos de la Real: Silva bailó en Elche
Impresionante partido del mediapunta de Arguineguin, clave en la victoria realista en el Martínez Valero, que llevó el sello con la cabeza de Le Normand y un notable Sorloth
-Remiro: Apenas tuvo trabajo una vez más. Poco pudo hacer en el gol del Elche, y después se mostró seguro en los balones aéreos y en las ocasiones que generó al final el equipo ilicitano. Con los pies, otra vez, prácticamente infalible.
-Zaldua: Partido muy serio, pero su puesta en escena fue deficiente, no entendiéndose con Zubeldia y convirtiendo su banda en una autopista para la subida por banda de Mojica, al que luego sí supo atar en corto. Vio una amarilla absurda que le impedirá jugar contra el Betis.
-Zubeldia: Partido lleno de altibajos del azkoitiarra. Imperial en las disputas y en los duelos, no tan acertado en su colocación. Se equivoca gravemente en el gol de Carrillo al hacer mal la cobertura a Zaldua. Y luego con el balón tuvo más dudas de lo que acostumbra. Casi regala el 2-0 al Elche y tuvo alguna cesión atrás a Remiro muy peligrosa.
-Le Normand: Otro gran partido completo del central francés. Apenas tuvo errores, equilibró la defensa con sus ayudas, se llevó golpes tremendos de los delanteros del Elche, y encima marcó por fin su primer gol en Liga con un buen remate de cabeza. Eso sí, arriesgó en exceso en una disputa al final del partido agarrando un poco a su rival y haciéndole caer, en una acción en la que se pudo pitar penalti. Llega tarde a cerrar a Carrillo en el 1-0.
-Rico: No estuvo al nivel soberbio de otras tardes, pero sí cumplió con creces. Cerró bien su banda todo el partido y se sumó al ataque con insistencia, pero sin acierto. Fue sustituido para darle un poco de aire.
-Zubimendi: Partidazo del donostiarra. Siempre dando equilibrio al centro de campo realista. No se complicó con el balón y apareció en toda la zona ancha para dar coberturas a sus compañeros.
-Rafinha: Sigue creciendo el brasileño y teniendo más influencia en el juego de la Real. Cada vez se le nota más cómodo, conectando con Merino y Silva, y tiene más confianza a la hora de intentar acciones de peligro. Y se afana en tareas defensivas. A pesar de la plasticidad de sus acciones, le faltó claridad en los metros finales.
-Merino: Muy mejorado de sus problemas en el pie izquierdo, tuvo una actuación muy completa en todas las facetas, con o sin balón. La Real es mejor siempre con el navarro en el campo.
-David Silva: Partidazo del canario. Bailó sobre el césped del Martínez Valero con una actuación sublime. Autor de las asistencias de los goles de la Real, entre líneas jugó siempre con criterio y con peligro. Ofreció un clinic de cómo moverse en línea de tres cuartos y asociarse con sus compañeros. Pudo marcar también, protagonizó las mejores jugadas, casi regala el 1-3 a Portu, y el campo le despidió con una ovación cuando fue sustituido. A este nivel la Real está tardando en ofrecerle la renovación.
-Isak: Estuvo negado. Intentó mucho, le salió casi nada. No se le puede reprochar nada, porque llevo peligro en cada acción que protagonizó. Perdonó tres ocasiones clarísimas. Y le anularon un gol de penalti por hacer paradinha justo en el momento de golpear la pelota, algo que no está permitido y que un profesional como él debería saber.
-Sorloth: Tuvo un papel decisivo en la victoria de la Real en Elche. Notable partido del noruego, que generó mucho peligro con sus acciones y encima marcó el gol que abrió el marcador para la Real y que suponía el empate momentáneo. Antes había provocado el penalti que le anularon a Isak.
-Januzaj: Salió del banquillo y cuando intervino, lo hizo con acierto. Pero fue demasiado intermitente.
-Portu: De nuevo, generoso en el esfuerzo, irrelevante en el juego. No paró de tirar desmarques a la espalda de la defensa, pero con ninguno sacó ventaja.
-Aritz Elustondo: Salió para defender en el tramo final y estuvo a punto de marcar el 1-3. Siempre cumple.
-Gorosabel: En el tramo final tuvo problemas para contener las subidas por la banda de Mojica.
-Aihen Muñoz: Mucho trabajo para tapar centros laterales en los últimos minutos.