Miki Bermejo, pasión por Osasuna y los cromos
Atesora en su casa decenas de recuerdos rojillos entre los que podemos encontrar desde unas botas de Puñal hasta un trozo de césped de El Sadar. Su bien más preciado son los cromos antiguos de Osasuna. Una vez al mes organiza un rastrillo que merece la pena ver.
Hace aproximadamente un año, el pamplonés y osasunista hasta la médula, Miki Bermejo, comenzó a recopilar todo tipo de objetos relacionados con Osasuna. En el salón de su casa podemos encontrar camisetas, unas botas de Puñal, cromos antiquísimos, de los años 30, abonos de Osasuna de los 70 e incluso un trozo del césped de El Sadar sobre el que los rojillos lograron en la temporada 2005- 2006 la clasificación para la previa de Champions.
La cantidad de objetos y recuerdos que atesora le han llevado a instaurar un rastrillo que tiene cita el primer domingo de cada mes en los bajos de El Sadar, en un local que le cede la Federación de Peñas. Son muchos quienes le han hecho llegar recuerdos rojillos, sobre todo cromos, y todo el que quiera puede admirar su colección e incluso llevarse algún pequeño obsequio, como cromos de temporadas anteriores.
Miki nos cuenta que: “He sido aficionado de Osasuna, pero en los últimos años me había quedado un poco, a otras cosas. Cuando falleció mi padre, empecé a encontrar cosas que él guardaba y pensé en buscar todo lo que pudiera de Osasuna, antiguo. Entendía que son cosas, sobre todo el papel, que cada vez van a ser más difíciles de encontrar”. Sin duda, los cromos antiguos, tal y como relata, son sus piezas más valiosas: “Los guantes, botas antiguas y demás lo tengo como representación de lo que se llevaba cuando yo era chaval. Pero en lo que más centrado estoy es en el tema de los cromos”.
A la hora de quedarse con el objeto más preciado de su colección, duda: “He conseguido algún escrito de los años 20, pero lo más preciado sea tal vez el álbum de los cromos más antiguos. Son muy difíciles de conseguir. Yo diría que únicos”. Sus recientes apariciones en prensa, han hecho que mucha gente se haya puesto en contacto con él para donarle recuerdos rojillos y futbolísticos: “El otro día me llamó un amigo del colegio, que no nos veíamos desde entonces, para darme un álbum del Mundial 82, otro amigo me dio un montón de álbumes. Voy a intentar acabar lo que falta, tengo trabajo”.
En cuanto a qué le dice la gente sobre esta afición, Miki afirma con humor: “Me dicen que soy un friki. Y es que realmente lo soy, pero a mucha honra. Es algo bonito. Siempre tiene que haber alguien para ocuparse de las cosas pequeñas y esto lo es. Pero es importante porque es parte de la historia. Dentro de unos años estará todo digitalizado pero nos gustará ver y oler un cromo de los de antes”.
La próxima fecha de este original rastrillo es el domingo 3 de abril, entre las diez de la mañana y las dos de la tarde y sobre él nos adelanta algunas cosas: “Habrá un montón de cromos para que si a alguien le faltan se los lleve. Enseñaré todo lo que tengo y la gran atracción es que Mikel Fernández, que ha hecho una maqueta preciosa de El Sadar, con todo lujo de detalles, la va a llevar para que esté expuesta y la gente la pueda ver”. Y anima a que todo el que quiera: “Venga, traiga sus cosas, abran los cajones y que sepan que la basura de alguien puede ser un tesoro para otro”.