A evitar el mal de altura
El Racing llega a Calahorra con la intención de consolidar su liderato frente a un equipo que pelea el playoff. Si juega, Parera renovará una temporada más
En Perú y Bolivia, que saben mucho del mal de altura, lo combaten mascando hoja de coca. El Racing, que ya mira desde arriba a los otros 19 equipos, viaja a Calahorra con la esperanza de que no le afecte ese mal de altura. Obviamente, no es cosa de que los futbolistas de Romo salten a La Planilla mascando como si fueran pastores de alpacas en Ayacucho, pero el objetivo es el mismo: poder dar su mejor versión pese a la presión añadida de estar en todo lo alto. Para eso han trabajado durante toda la semana en las entrañas de La Albericia en dar normalidad a la situación y quitarle el carácter decisivo al duelo con el Calahorra. Es más fácil decirlo que hacerlo, pero este Racing ha sido hasta ahora muy fiable en los momentos cruciales.
Con los números en la mano, ambos equipos llegan a este partido en su mejor momento: cinco victorias y un empate en los siete últimos partidos los calagurritanos, nueve victorias y tres empates en los últimos doce los santanderinos. Además, tanto Eduardo Docampo con Guillermo Fernández Romo tienen a casi todos sus hombres en perfecto estado de revista. En el Calahorra solo es baja Martínez-Losa (que estuvo a punto de ser racinguista en enero), que se rompió los ligamentos de su rodilla derecha en Tudela, el 6 de febrero, y acabó ya su temporada. El Racing, por su parte, solo se deja en Santander a Manu Justo, con una microrrotura de fibras en el bíceps femoral de su pierna derecha.
Con la vuelta de Patrick Soko, que cumplió sanción el pasado fin de semana, Romo va a volver a cambiar de costado a Arturo, ya que el africano recuperará la banda derecha y el murciano pasará a la izquierda, en detrimento de Camus y Bustos, que empezarán en el banquillo. En el resto del once no se esperan cambios respecto a los que empezaron frente al Zamora. Si acaso, tiene alguna opción de recuperar la titularidad Borja Domínguez, que lleva cuatro suplencias consecutivas, algo que no había sucedido hasta el momento, y que acabó la jornada anterior dando una sistencia de oro a Cedric en el 92', nada más entrar en el terreno de juego. El 4-2-3-1, al menos mientras esté disponible Pablo Torre, parece innegociable.
En el bando local tampoco se esperan demasiadas novedades respecto al equipo base que le ha llevado a los de Eduardo Docampo a ganar los tres últimos partidos, si acaso es probable que Cera entre por Íñigo Zubiri en el lateral derecho. El 4-4-2 es el dibujo de partida del técnico bilbaíno y los acontecimientos, obviamente, le están dando la razón.
El Racing estará acompañado en La Planilla, pero probablemente con menos aficionados de lo que hubiera sido previsible en caso de que el duelo se jugara en domingo o, al menos, no se hubiera producido el bailes de horarios (viernes 21:00, domingo 12:00 y, finalmente, sábado 17:00) al que ha estado sometido el partido. En la taquilla de El Sardinero solo se han despachado 303 entradas para el partido en Calahorra, así que lo más probable es que sean algo menos de medio millar los racinguistas que apoyen al líder este fin de semana en las gradas. El partido puede ser muy especial para Miquel Parera que, de jugar, como parece absolutamente seguro tras 21 titularidades consecutivas, renovará por una temporada más con el Racing. Justo premio a su gran temporada y buena noticia para ambas partes.
(Foto superior: Miquel Parera posó para AS este viernes en la Plaza Porticada de Santander)
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