Gallagher, un poco de luz para el Chelsea
La revelación de la Premier League volverá al equipo de Stamford Bridge en verano. Es una de las pocas noticias positivas para los blue, en plena crisis.
Conor Gallagher corre con el 23 a su espalda, es rubio y es un fino lanzador de faltas, pero a nadie en Selhurst Park se le ocurre compararle con David Beckham. Gallagher es un tipo distinto, un mediapunta tan fuerte como versátil, que está para lo que haga falta en el Crystal Palace, aunque su destino final será el Chelsea, donde tiene contrato hasta 2025.
Thomas Tuchel, de hecho, quiso romper la cesión en el pasado invierno y traerlo de vuelta a Stamford Bridge a mitad de temporada. Pero, para entonces, Gallagher ya había jugado 16 de 17 partidos posibles, sobrepasando el 50% de los encuentros del Palace. Una condición del contrato que impidió al Chelsea contar con él para el tramo decisivo del curso, según informó en su momento el Daily Mail.
Pero en el club blue están tranquilos, porque saben que al final de la presente campaña ya podrán contar con él. A pesar de la sanción impuesta por el gobierno británico a Roman Abramovich y las consiguientes restricciones económicas, el equipo de Londres tiene un contrato en vigor con el futbolista, por lo que no habría ninguna traba para su retorno. Un alivio para la entidad, que está en pleno proceso de venta, pero que tiene atado el futuro de unos los jóvenes más valiosos del panorama internacional.
Ocho goles en esta Premier son la carta de presentación de Gallagher, que se ha convertido en el líder del Crystal Palace, situado en el puesto undécimo del campeonato, con la salvación asegurada. Bien lo sabe Patrick Vieira, el entrenador de los Eagles, para quien el centrocampista de 22 años es indiscutible.
Y ayer lo volvió a demostrar ante el Manchester City, cuando al Palace le tocó arremangarse el pantalón, aunque Gallagher no parecía incómodo persiguiendo a los hombres de Guardiola. En un partido distinto,en el que al Palace le tocó perseguir sombras, el jugador del condado de Surrey se batió con tesón y salió ganador de ocho duelos. Esas recuperaciones dieron aire al equipo de Vieira, que acabó sacando un valioso empate al líder de la Premier.
Al final del encuentro, Gallagher atendió a los micrófonos de Sky, pero no parecía extenuado después de su enorme despliegue físico -corrió más de doce kilómetros y lanzó 14 sprints-. Su fortaleza es tremendamente valorada por la afición inglesa, acostumbrada a mediapuntas livianos y menos briosos, pero que ven en Gallagher a un futbolista con mucha fortaleza.
Ya le veían así en las categorías inferiores del Chelsea, donde fue capitán, y también en sus dos cesiones anteriores en Charlton y Swansea. Un periplo que sólo le ha servido para curtirse aún más y ganar en llegada, en conducción y, sobre todo, en confianza; lo que le ha convertido en uno de los mediocampistas más completos de la Premier, y en una de las mejores noticias posibles para Tuchel, ahora que todo parece más gris en Stamford Bridge.