El gol del Leganés, asunto extremo
Los atacantes de banda del Leganés acumulan el 39% de los goles del equipo, frente al 21% que acumulan los delanteros. Arnáiz y Randjelovic, pichichis. Ayuda el estilo de juego.
El gol en el Leganés asunto extremo. Una tarea que parece encomendada (y afortunada) más para los jugadores que compiten pegados a la cal, que para los que pisan el área con regularidad. Los hombres de los costados blanquiazules acaparan el 39% de los tantos del Lega (13 en total) y sólo Naim (extremo zurdo) no ha mojado en lo que llevamos de temporada. Es excepción entre los de su rol en la plantilla. Los delanteros, por su parte, acumulan el 21% de los goles pepineros (7 en total) en unos guarismos que representan casi la mitad de los tantos conseguidos por los jugadores de banda.
El último en unirse a la fiesta del gol fue Rober Ibáñez. El valenciano salió en el tramo final del partido ante el Ibiza y marcó el gol del empate. Un tanto importante para el equipo, pero también para él mismo, porque le permitirá ganar en confianza ante su situación especial. Aún no ha debutado de titular en Liga pese a que fue el primer refuerzo invernal. Las lesiones y una alta competencia le han impedido estrenarse de inicio.
Arnáiz y Randjelovic, pichichis
Precisamente se podría pensar que el número de extremos (cinco) frente al número de delanteros (cuatro) podría distorsionar la estadística. Sucede, sin embargo, que sólo dos de los primeros suman más tantos que todos los segundos. Arnáiz y Randjelovic son, con cinco dianas cada uno, los máximos goleadores de la plantilla blanquiazul frente. Superan en tres tantos a los conseguidos por los cuatro representantes en ataque. A saber: Garcés (dos tantos), Juan Muñoz (otros dos), Bautista (dos más) y Qasmi (un gol).
Cuestión de estilo
Estos números son, en parte, reflejo del estilo de juego de un Leganés que rompe muy bien desde segunda línea con llegadores (extremos) que atacan bien los espacios y se aprovechan de la capacidad para generar superioridades ante el rival de sus mediocampistas y en especial de Rubén Pardo (siete asistencias).
De hecho, también ante el Ibiza pudo aumentar las cuentas de los extremos. Yoel Bárcenas marcó un gol en la segunda mitad, pero le fue anulado por fuera de juego discutido por el Leganés, que alegaba que cuando la bola le llega al panameño, lo hace después de haber dado en un rival y, por lo tanto, que no debería ser fuera de juego. Algo así como lo que le sucedió a Mbappé y Eric García en la final de la Nations League.
En todo caso, los números ofensivos del Leganés están mejorando. El equipo acumula cinco partidos consecutivos marcando y ha visto puerta ya en el 74% de los encuentros. Una señal de que el potencial ofensivo de los pepineros ha mejorado con respecto a sus pobres guarismos de principio de curso, aunque para el Leganés, el gol sea más una cuestión de extremos, que de delanteros centro.