El reflote de Moreno y el 3 de 30 de Rubi: parecidos y diferencias
Tras la victoria ante el Getafe, y a pesar de venir de una racha de tres puntos sobre 21, el Espanyol solo ha perdido una posición. Pero Europa es ya una utopía.
Reflota el Espanyol tras su victoria del pasado sábado ante el Getafe, con lo que deja atrás –al menos, por el momento– la peor racha numérica de la temporada, siete jornadas en las que no fue capaz de ganar un solo partido y en las que sumó tres puntos sobre 21. Lo cual, por raro que parezca, no es la peor inercia ni de la historia, ni tan siquiera de los últimos tiempos. De hecho, existe una todavía más intensa hace tres temporadas, y sucedió en la misma campaña en la que el equipo perico acabó séptimo clasificado, con lo que accedió a la Europa League. Tres puntos de 30 acumuló el Espanyol de Joan Francesc Ferrer ‘Rubi’.
| Clasificación | PTS | PG | PE | PP |
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Sobre el papel, aquella racha fue peor. Primero, porque se alargó hasta las diez jornadas de Liga, por las siete de estos meses de enero y febrero. Y segundo, porque nueve de esos encuentros los perdió el conjunto perico, que en esta ocasión había ido flirteando entre empates (tres) y derrotas (cuatro). Pero fue capaz de ganar al séptimo partido, en aquel caso un 1-0 ante el Leganés, lo cual ahora ha sucedido ante otro rival madrileño, el Getafe, a la octava.
Lo positivo de la racha de Rubi, a buen seguro lo que no precipitó a Chen Yansheng y a los entonces directores generales del club –Roger Guasch y Óscar Perarnau– a decidir su destitución, era el colchón que la precedía. En el momento de iniciar la dinámica perdedora, el Espanyol marchaba segundo, espectacular, con 21 puntos en 11 jornadas, solo por detrás de los 24 del Barcelona y delante de Atlético de Madrid, con 20, o los 17 del Real Madrid. El actual equipo era decimoprimero, con 26 puntos en 19 jornadas. Tras el 2-0 del sábado, se sitúa decimosegundo, por lo que en el bache de siete jornadas solo ha perdido una posición.
Pero lo salvable del tres de 21 de este inicio de 2022 es que –gracias más al demérito de los rivales de abajo que al mérito propio– en siete jornadas solo se acercó el Espanyol en tres puntos al descenso, que ha pasado de estar de 11 puntos a los ocho actuales. Con Rubi, el tres de 30 puntos conllevó situarse decimoquinto, a solo tres de las posiciones para bajar a Segunda.
¿Y qué sucedió tras la racha de Rubi? Pues que el Espanyol sumó 29 puntos más en las 17 jornadas restantes, con siete victorias, ocho empates y solo dos derrotas. Con la clasificación europea y dejando el descenso finalmente a 16 puntos. Ahora, si bien el tema continental parece utópico, sí dispone Vicente Moreno de margen para alejarse tanto de las llamas: quedan 11 jornadas, o lo que es lo mismo, 33 puntos. El juego sigue el próximo sábado, en la visita al Levante.