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ATLÉTICO DE MADRID

Lodi elige el camino difícil

Si tiene minutos renovará, si no, en junio buscará otra opción. "La llegada de Reinildo podría haberle hecho elegir lo fácil, pero quiere pelear", afirman los cercanos. Inició los trámites para ser comunitario.

Lodi celebra uno de sus goles al Celta.
AFP7 vía Europa Press

Lodi no ha podido tener una respuesta mejor a la presencia de competencia directa en la plantilla. El lateral izquierdo brasileño no lo ha pasado del todo bien en los últimos meses. No ha terminado por sentirse la primera elección de Simeone casi nunca y menos esta temporada. Todo se le oscurecía en el Atlético. Reinildo llegó en enero y las miradas apuntaban directamente al brasileño que veía cómo el club, a instancias del técnico, incorporaba un perfil claramente opuesto al suyo. Los mensajes eran claros. Primero, la apuesta por Carrasco, después, por Hermoso en muchos tramos y, ahora, la competencia con un nuevo compañero de reparto.

Pero cuando más difícil parecía su panorama en el Atlético ha llegado un punto que quiere que sea de inflexión. El buen partido contra el United, con Lindelof en contra en su flanco, y su doblete al Celta como un jugador liberado han relanzado sus opciones y espera que cambien su inercia. "La llegada de Reinildo podría haberle hecho elegir el camino fácil y cómodo, dejarse ir hasta junio y buscar una salida, pero quiere pelear", afirman los cercanos. Lodi ha recibido con agrado las palabras de Simeone, pero también con cautela. Se fija tres meses de examen para clarificar su futuro.

El jugador ha pasado por mucho desde que llegó al Atlético y está por tomar una decisión en virtud de lo que suceda en las próximas semanas. Simeone ha venido lanzando mensajes dirigidos a los que jugaban menos y se deshizo en elogios hacia Lodi por la "humildad" en su trabajo y por cómo ha recibido a Reinildo. El brasileño observa como una oportunidad también su nuevo cometido en el equipo, más avanzado, con una línea de tres centrales detrás que le cubra las espaldas para expresarse en ataque más libremente. Lodi agradece que el Cholo reconozca su trabajo y, más aún, la sinceridad de Andrea Berta, su gran valedor desde que llegó al Atlético en 2019 por unos 20 millones. Pero también es consciente de que todo está sucediendo con Carrasco, sancionado en la Champions, y volviendo de un periodo de baja por Covid. 

El brasileño quiere jugar, esa es su obsesión y lo único que va a marcar lo que suceda. Se centra en aprovechar cada minuto, porque sabe que si flaquea, la plantilla tiene opciones para inmediatamente sustituirle, como ya ha sucedido. El escenario ideal es que la nueva posición, con más facilidad para atacar, le pudiera potenciar, pero lo que espera es que el equipo, más allá de su propio rendimiento, enlace una secuencia de partidos positiva que normalice las elecciones de Simeone. Que el equipo se adapte al esquema y a Lodi con él.

En este momento, su situación es clara. Si hay minutos y observa un cambio de dinámica de aquí al final de la temporada, probablemente, renovará con el Atlético el contrato que tiene firmado hasta 2025. Si no juega asiduamente y vuelve a la situación que vivió en la primera parte de la temporada, buscará una salida en junio. El recorrido que se le adivinaba desde que creciera en el Paranaense era el de un lateral llamado a ocupar durante tiempo la banda izquierda de la selección brasileña, pero no jugar frustra ese plan.

A la espera de conseguir el pasaporte italiano.

Paralelamente, el defensa inició hace ya algún tiempo los trámites para conseguir el pasaporte italiano, aunque no hay una estimación clara sobre cuándo podría obtener la nacionalidad. Depende de la burocracia. El pasaporte comunitario serviría para liberar una plaza de extranjero al Atlético, que en este momento las tiene ocupadas con él, Felipe y Cuhna. La vitola de comunitario convertiría a Lodi en una pieza más valiosa todavía. En la última semana llegaban desde Italia noticias de que la Juventus estuvo en el Metropolitano viéndole en directo. Al jugador lo único que le consta ahora mismo y le quita el sueño es tener minutos e invertir la inercia de la temporada. Si no, la decisión aparece clara.