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INGLATERRA

Las lágrimas de Bielsa

El técnico argentino fue destituido el fin de semana, y se despidió el lunes de sus ex jugadores con emoción.

Marcelo Bielsa, ex entrenador del Leeds United.
LINDSEY PARNABYAFP

"¡Kalvin! ¡Kalvin, carajo!". Centrocampista y entrenador se abrazan después de lograr el ascenso a la Premier League. El primero del Leeds United en 16 años. Demasiado tiempo para un histórico del fútbol inglés. Demasiadas penurias por la segunda e incluso la tercera categoría. Pero en 2019 regresaron. Al fin. Después de años frustrantes y tristes, de tiranteces entre aficionados, directiva y entrenadores. "¡El mejor, Kalvin! ¡Muy bueno!". Marcelo Bielsa abraza y besa a Kalvin Phillips, como un abuelo orgulloso de los éxitos de su nieto. Tremendamente orgulloso. El video lo publicó en redes sociales el futbolista: "Viste en mí lo que ni siquiera yo había visto. Me ayudaste a crecer como futbolista, pero sobre todo como jugador". Bielsa reinventó la posición de Phillips, que pasó a ejercer de centrocampista de contención. Y terminó siendo una de las novedades en la convocatoria de Inglaterra para la pasada Eurocopa.

Hay victorias y victorias. Las hay que son ajustadas, poco convincentes. Las hay que son elaboradas, costosas y satisfactorias. Como las derrotas. Goleadas desmoralizantes, o el varapalo de un gol en el último instante después de 90 minutos de esfuerzo. Con Bielsa el Leeds United se movía en el alambre. Iba con todo, sin que importase mucho qué rival estaba enfrente.

La marcha de Marcelo Bielsa no es una destitución más. Pagó el caro precio de los resultados, como todo entrenador, pero el legado y el vacío que deja en Elland Road es único. El escritor y novelista Robert Endeacott también utilizó las redes sociales para despedirse del argentino, a quien lo comparó con Don Revie. Dos ligas, una FA Cup, una Copa de la Liga y dos Copas de Ferias ganó Revie en la etapa más exitosa del club de Yorkshire entre 1961 y 1974.

Hubo sintonía. La llegada de Marcelo Bielsa, un desconocido admirable, reforzó la sensación de club grande. En el banquillo de Elland Road se sentaba un tipo que, pese a sus escasos éxitos, había inspirado a infinidad de personalidades dentro del fútbol. El entrenador favorito de tu entrenador favorito. Llegó y preguntó por la ciudad, por la gente. Se le vio en el supermercado con su chándal del club y celebró el ascenso brindando con sus vecinos, que acudieron a felicitarle cuando el West Brom perdió en casa del Huddersfield Town en julio de 2020. Bielsa completó su misión en una campaña marcada por la irrupción del COVID-19. La parroquia de Elland Road no pudo acompañar a los suyos durante la escalada a la Premier League, y tampoco en su vuelta a la máxima categoría.

Tras caer por 0-4 ante el Tottenham el sábado, el Leeds sumaba la novena derrota en 12 partidos y se acercaba peligrosamente a los puestos de descenso. Lastrado por las lesiones, el Plan A no funcionaba. Y no hubo Plan B. La directiva del club decidió prescindir del argentino, abriendo un debate que no podrá ser resuelto. ¿Valía la pena seguir apostando por Bielsa? ¿Incluso tras un hipotético descenso? ¿Vale la pena mantener la categoría sin el argentino? ¿Con qué juego? ¿A qué precio?

Marcelo Bielsa recordó a una afición que ya no recordaba qué era ganar, que ganar no lo es todo. Y lo hizo, paradójicamente, logrando el mayor éxito del club en casi dos décadas. El lunes regresó a Thorp Arch, la ciudad deportiva del Leeds United que él mismo ha ayudado a reformar. El argentino habló con sus jugadores. Como cualquier otro lunes. Aunque en esta ocasión no hubo análisis, reprimendas ni consejos. Hubo abrazos y lágrimas. Fue una despedida emotiva. Luego firmó autógrafos a varios aficionados que esperaban a la salida. Aficionados que volverá a ver. A falta de que se confirme la fecha, habrá un homenaje para despedir al hombre que sentó las bases del Leeds United del futuro. Un entrenador admirado y querido, más allá de copas y títulos. "Hay gente que

disfrutó más del camino hacia la Premier League, que del hecho de jugar en la Premier League", escribe Phil Hay en The Athletic. "Llegar hasta aquí fue mejor que el hecho de estar aquí, porque el camino es todo lo que importa. Vivir no es lo mismo que existir, y existir parece ser todo lo que importa a los clubes de la máxima categoría".