“Estoy convencido de mi trabajo; si yo fuera el problema del Zaragoza, no estaría aquí”
JIM asegura que el club no le ha comentado nada acerca de su situación y subraya la importancia del partido contra Las Palmas: “No tenemos margen de error”.
El Real Zaragoza sólo ha sumado cuatro puntos de los últimos 24 y ya se sabe que en el fútbol no hay nadie más débil que un entrenador que no gana partidos. En este sentido, Juan Ignacio Martínez asegura que nadie en el club le ha comentado nada acerca de su situación: “Yo estoy convencido de mí mismo, de mi trabajo, y del convencimiento de los futbolistas. Si yo fuera el problema del Zaragoza, no estaría aquí, me voy mañana”. Además, el técnico señala que los jugadores tienen aptitudes de sobra para sacar esta situación adelante y subraya la importancia del partido de este sábado contra la Unión Deportiva Las Palmas: “Esta semana ya no tenemos ningún margen de error ni maniobra. Queremos por todos los medios darle esa alegría tan grande a la afición”.
−¿Qué importancia tienen el partido de este sábado contra la Unión Deportiva Las Palmas?
−Recuerdo que la temporada pasada, en mis primeras comparecencias, decía que había que ganar porque estábamos con muy pocos puntos. Ahora no estamos en la misma situación, pero es evidente que llevamos mucho tiempo sin ganar. Además, jugamos en La Romareda, con lo que hemos hecho hasta ahora, que hemos ganado muy poco y hemos dado muy pocas alegrías a la afición. Después de Leganés estábamos muy fastidiados, como es evidente, pero ha ido transcurriendo la semana y los jugadores van recuperando ese ánimo. Están convencidos de lo que nosotros hacemos y de lo que les transmitimos y ahora hay que hablar muy poco y darle esa alegría a la afición.
−¿Qué ambiente espera en La Romareda?
−Hice un máster después del partido de Leganés. Antes de subir al autobús nos estaban esperando muchísimos aficionados y la rueda de prensa la tuve con ellos. Me hicieron multitud de preguntas y de acusaciones, como no puede ser de otra manera, y era el momento de dar la cara. Yo entiendo perfectamente que haya ese puntito de crispación cuando un equipo como el Real Zaragoza no está en esa dinámica que todo el mundo quiere de ganar partidos. Pero también entiendo que noventa minutos son muy largos y que La Romareda es un estadio en el cual el rival tiene que sentirlo. Yo no voy a pedir nada a la afición porque ya nos dan. Ojalá que esta semana rompamos esa dinámica, sabiendo que la Unión Deportiva Las Palmas es un rival de la parte alta y que aspira a lo máximo, pero somos el Real Zaragoza y esta semana nosotros ya no tenemos ningún margen de error ni maniobra. Queremos por todos los medios darle esa alegría tan grande a la afición.
−El Zaragoza hizo contra Las Palmas uno de sus primeros partidos. ¿Es posible repetirlo?
−Es un equipo que juega muy bien al fútbol y que busca constantemente la portería rival. A nosotros se nos puede acusar de muchas cosas, pero somos un equipo que también va al área rival, que intenta robar lo máximo posible, que intenta tener el balón… Va a ser un partido en el que habrá que tener mucha paciencia y mucha concentración en las vigilancias porque ellos tienen jugadores determinantes en la categoría. En ese aspecto, yo creo que se va a ver un buen partido, pero deseamos que los tres puntos se queden en Zaragoza.
−¿Cómo están Francho y Álvaro Giménez?
−Hablé con el doctor después del entrenamiento y la verdad es que están muy bien. La evolución ha sido progresiva porque ha sido una semana larga. Yo creo que van a llegar bien al partido, aunque ya sabéis que después del último día que comparecí tuvimos la sorpresa de esas molestias de Álvaro y no jugó. Esperemos que en este caso no tengamos ninguna sorpresa y podamos contar con todos.
−El consejero Fernando de Yarza señaló ayer en una entrevista que había absoluta confianza en el club en su trabajo. ¿Usted lo siente así? ¿Le ha transmitido algo el club?
−El fútbol es efímero y, por suerte o por desgracia, podemos reivindicarnos cada siete días. El fútbol no entiende ni de justicia ni de trabajo. Agradezco las palabras del consejero y en ningún momento por parte del club me han transmitido nada. Cada día me levanto como si estuviese aquí toda la vida. Trabajo para ello y le dedico muchas veces más tiempo del que tengo que hacerlo para volver a ser capaces de ganar, aunque muchas veces con más volumen de trabajo no lo consigues, pero sobre todo estoy convencido de mí mismo, de mi trabajo, y del convencimiento de los futbolistas, que son los artistas. Cuando miras a la cara a los jugadores y ves que no hay ninguna duda, eso es lo que te hace levantarte todos los días. Si yo fuera el problema del Zaragoza, no estaría aquí, me voy mañana. Yo creo que el problema no es el entrenador, sino que el fútbol es de aciertos y ahora mismo no estamos acertados, pero yo espero que se rompa esta dinámica esta semana y podamos volver a estar un poco más contentos todos.
−¿Qué cosas debe hacer el equipo para que llegue ya esa primera victoria?
−Nosotros debemos tener un grado de atención muy alto porque nos penaliza mucho cualquier error. Para meter goles debemos hacer un trabajo muy grande y, sin embargo, encajamos con facilidad. Hacemos una presión alta y debemos tener una atención tremenda porque hay mucho talento en la categoría y cualquier acción en la que llegas tarde a un balón o a la presión nos penaliza. Eso es algo que contra Las Palmas no nos lo podemos permitir porque es un equipo que cuenta con jugadores determinantes.
−¿Está siendo una de sus temporadas más duras como entrenador?
−Recuerdo situaciones difíciles en Valladolid o Almería. Por mi genética mental y mi actitud positiva me viene más a la memoria todo lo positivo. No es que sea más difícil o preocupante, sino que ahora mismo se junta en la coctelera esa trayectoria del Real Zaragoza, que es un club grande que está en una situación irracional tras varias temporadas en Segunda y ahora en la parte baja, sin ganar partidos. Todo eso genera este clima. Cuando un jugador ficha por el Zaragoza es por su trayectoria deportiva, por su currículum y porque tiene aptitudes de sobra para sacar esta situación. Es verdad que la dinámica es negativa, pero también es cierto que el Zaragoza ha merecido mucho más. Aunque no se trata de merecimientos, sino de la realidad. Por tanto, debemos intentar cometer los menores errores posibles para estar en la parte que nos corresponde.
−¿Cómo vive el vestuario y Juan Ignacio Martínez toda esa situación de incertidumbre por ese posible cambio accionarial?
−Es más una cosa institucional, de los medios de comunicación o de los aficionados. A nosotros nos pagan todos los meses y no hay ninguna queja. Nosotros trabajamos con normalidad y lo que realmente influye en nuestro trabajo es ganar partidos. Nuestra obligación es que nuestro rendimiento en el campo sea acorde con lo que se nos pide a nosotros. A partir de ahí, pueden surgir noticias y llegado el momento será el club el que nos las transmita.