NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

ITALIA

"La Federación nos drogó para echar al seleccionador"

Mazzola, leyenda de la Selección italiana, ha concedido una entrevista a Líbero, en la que ha desvelado el motivo de la eliminación en el Mundial del 66.

Actualizado a
"La Federación nos drogó para echar al seleccionador"
Marco Luzzani - InterFC Internazionale via Getty Imag

Alessandro Mazzola, leyenda del Inter y de la Selección italiana, ha concedido una entrevista a la revista Líbero, en la que narra un suceso que a día de hoy sería incomprensible. También en su momento. Todo ocurrió en el Mundial de Inglaterra en 1966. Italia llegaba como una aspirante a gran papel, pero cayó estrepitosamente en la fase de grupos. Primero ganó a Chile, después perdió contra la Unión Soviética, una potencia. Llegó a la última jornada con todo en juego, ante Corea del Norte. La victoria daba la clasificación a los 'azzurros'. La derrota, les dejaba fuera. Finalmente, el equipo asiático logró el triunfo y pasó a la segunda fase.

Italia era favorita para lograr el pase, pero algo sucedió. Ahora, Mazzola lo ha desvelado: "¡Mamma mia! ¡Una tragedia! Pero la verdad es que este fracaso fue sospechoso. Cuando volvimos a Italia después de la eliminación no tenía ganas de hacer nada. Ni de salir con mi mujer, ni de hacer el amor, me sentía siempre cansado. Hasta que un día vino el seleccionador Edmondo Fabbri y me pidió hacerme unas analíticas. En aquellos días todos los que se cruzaban con él en la calle lo querían pegar, la atmósfera era inaguantable".

Esas analíticas, a posteriori, serían la clave de todo: "Después de las analíticas descubrimos que habíamos sido drogados al revés por alguien de la Federación que quería hacerle la cama al entrenador. En mis orinas había más ansiolíticos… Después hablé con alguno de mis compañeros de aquel Mundial y nos reunimos todos con Fabbri. Todos teníamos los mismos síntomas y nos dimos cuenta de que habíamos sido víctimas del complot de algunos directivos que querían hacer la revolución. Juntos decidimos hacer frente a la situación, pero no terminó en nada porque en Italia Fabbri tenía mala fama y lo hicieron pasar por loco".