El valor estructural de Kirian
El tinerfeño destacó en tres apartados que fundamentaron el juego amarillo con balón ante el Cartagena. Su importancia en el equipo crece cada jornada.
El pasado domingo volvió Kirian González a la titularidad y como si de un preestreno fuera el propio jugador compareció en rueda de prensa en la semana antes del partido. Su buena actuación ante la Real B saliendo de suplente hacía presagiar su vuelta al once como así se produjo.
Sin embargo era precavido el tinerfeño. “Él [García Pimienta] es quien plantea el partido y quien decide cuándo entrar y cuándo no. Da igual el estado de forma, al final tú planteas un partido para el rival, para enfrentarse a él y puede creer que hay otros jugadores mejores para ese rival”. Y al final el míster creyó que Kirian era el indicado para acompañar a Viera y Loiodice por delante de Mfulu para el partido ante los de Carrión.
Y así sucedió. En Cartagena, Kirian rindió a un grandísimo nivel. Más allá de lo más tangible y evidente, robó y asistió a Jesé en un mismo toque, el centrocampista fue pieza fundamental en la estructura de pases que armó la UD ante los cartageneros, jugando el rol de central de distribución en el césped.
Kirian fue el mayor receptor de pases del equipo con un total de 43. Además fue el jugador que más pases recibió de distintos compañeros, de 12 en total. Por poner en contexto, Loiodice recibió 36 pases de 10 compañeros.
Ampliando el contexto de la centralidad de Kirian, Cardona, el segundo jugador que más pases recibió con 41, concentró 31 de solo tres compañeros, Loiodice, Viera y Curbelo. Cabe indicar que los pases entre el central satauteño y el catalán fue la mayor de suma combinada entres dos jugadores amarillos. 25 en total. Un indicador de por donde tiende Las Palmas a salir jugando. Por el lado de Navas y Lemos, los pases cayeron a 9, casi un tercio de sus compañeros del flanco izquierdo.
No obstante, como decíamos la importancia de Kirian radicó en su centralidad en el juego y la catalización que le supuso a Viera y a Jesé tener a su lado al 20. Ambos jugadores, Jesé y Viera, fueron los que más participaron en jugadas que acabaron en tiro, además de ser los dos jugadores que dieron más últimos pases, 10 en total. Es decir, una decena de veces sus pases sirvieron para propiciar un disparo. Es más que evidente, por tanto, la importancia de hacerles llegar pelotas y García Pimienta encontró en Cartagena al encargado de esta labor, Kirian.
Y es que fue Kirian quien más balones surtió a las puntas de lanza de los amarillos. 8 pases a Viera y 5 a Jesé, consiguiendo que uno de cada tres pases de los que recibió fuera a tener a ellos de manera directa. De ahí la gran influencia del mediapunta en el partido ante el Cartagena pues se convirtió en el mayor destinatario de pases, el que recibió de más compañeros y además el que más encontró a los jugadores, Jesé y Viera, que más pases que provocan tiro son capaces de dar.
Kirian reclama con hechos por tanto un rol de apoyo fundamental para Las Palmas a la hora de estructurar con pelota un juego que necesita de fluidez y de saber hacia dónde encauzarlo, un aspecto crítico y es que como definió el propio Kirian, García Pimienta quiere “que seamos muy ofensivos y también protagonistas con el balón”.