Cuenca: "Hemos creído que Quique es nuestro líder desde el primer día"
El central avisa al Atlético: "Queremos revancha y tenemos la sensación de que ahora sí podemos hacerles daño".
Primer año en la elite. ¿Cuándo se dio cuenta de que iba para futbolista de verdad?
Cuando era cadete no lo esperaba. Poco a poco vas viendo esa posibilidad. Tocas el Alcorcón y sale bien y después te llama todo un Barça para jugar en Segunda y no te lo piensas. Ese día sí dices, esto va para adelante.
¿Y creerse que ya era jugador de Primera?
Al principio la dinámica del equipo no acompañó y nos sentíamos muy frustrados. No estábamos a nuestro nivel y necesitábamos un cambio de chip. No salía nada. Dejamos la portería a cero con el Levante y empezamos a creer. El día del Cádiz con el 4-0, mi primer gol... Si busco un momento sería ese, pero la confianza se va ganando poco a poco.
¿La cantera de un grande marca a un futbolista?
Es otro mundo. En el Barça todo gira en torno a la misma idea y todos los equipos juegan igual con una filosofía y un estilo muy respetables. Las charlas pre partido y de la semana tienen mucho que ver con el primer equipo.
¿Con quién coincidió por allí?
Formé pareja de centrales con Araujo y cuando subía al primer equipo, imagina el nivel.
Por ejemplo estaba Suárez. ¿Se apiadará de usted el domingo?
Es un jugador que quieres en tu equipo y no enfrente. Tiene garra, sacrificio y mucho gol. Puede estar todo el partido desaparecido y meterte dos zarpazos como nos hizo en la ida. Es top mundial y no te puedes descuidar un segundo.
Los demás no son malos.
Es un equipo con muchos recursos. Cunha, Correa, Joao Felix, Carrasco te puede coger por velocidad y regatearte en una baldosa. Sabemos que debemos estar concentradísimos y tenemos nuestras armas.
¿Qué aprendieron de aquel partido de ida que se les escapó tan al final?
Se aprende siempre y más en las derrotas. Iban primeros y nos dio confianza a pesar de la derrota. Ahora estamos en muchísimo mejor momento y ellos no tan bien, así que queremos revancha y tenemos la sensación de que ahora sí que podemos conseguir puntos en el Wanda. Podemos hacerles daño.
¿Su primer partido en ese estadio?
Fui con el Villarreal y no llegué a jugar. Me motiva especialmente porque es mi barrio. Irá gente a verme, es normal que los míos estén ilusionados.
¿Por qué cree que el Atlético ha perdido su solidez defensiva?
No creo que hayan cambiado de estilo con el mismo cuerpo técnico. Supongo que es más una cuestión de rachas. Por ejemplo a balón parado eran dificilísimos de batir y ahora están recibiendo goles.
Me habló del estilo Barça y ahora del Atlético de Simeone. ¿A Cuenca que fútbol le gusta?
Me considero un jugador que me puedo adaptar a lo que me pida cualquier entrenador. Me puede tocar jugar mucho el balón como hice en el Barça o Villarreal. Ahora estoy muy cómodo en otro estilo.
¿En que consiste el milagro de Quique?
Quique tocó la defensa, consiguió una formación en la que nos encontramos a gusto. Las cabezas no estaban bien por los resultados y se han ido recuperando. Lo hizo con muchísima calma, con respeto y humildad. Hemos creído que era nuestro líder desde que llegó. Tocó todo en lo que vio carencias y a trabajarlo.
¿En lo personal que le está aportando?
Muchísimo. No había jugado casi nunca en defensa de cinco y estoy aprendiendo un montón. Venía de otro estilo y esto es otro fútbol distinto que hay que jugarlo. Es un máster diario en defensa, en intensidad...
¿Al principio se arrepintió de haber elegido el Getafe?
Para nada. Incluso cuando las cosas iban mal el vestuario estaba muy unido. Me he encontrado un entorno que lo facilita todo, un gran grupo y un club muy familiar. Acerté de pleno.
Están de moda los centrales zurdos y las defensas de cinco. ¿Mejor para usted?
Hay muchos muy buenos en España y cotizados porque al final perfilarte por esa banda es más fácil con tu pierna natural. Y en cuanto a las defensas de cinco es otra manera de jugar. Tienes un central detrás si te ganan la espalda y saltas más seguro abarcando más campo. En determinadas situaciones te sientes más protegido.
¿La selección sería su máxima meta?
Voy día a día sin comerme la cabeza. Estoy super feliz y quiero disfrutar lo máximo estos meses en Getafe. La selección es un sueño por el que lucha cada niño desde que empieza.
¿Qué hace al acabar los partidos y qué espera hacer el sábado?
Hablar con mis amigos. Siempre nos quedamos una hora hablando de nuestras cosas. El sábado sólo desearía tres puntos en el Wanda y a celebrar. Nos falta conseguir una victoria a domicilio y en un estadio como ese nos haría mucho bien.