Los 100 días de la era Nafti: salida del pozo, pero sin milagro playoff
El técnico ha logrado 20 puntos en 13 partidos, el doble que en los primeros 13 encuentros de Liga, cuando cogió al equipo. El Lega sería 7º desde su llegada, pero no se despega del peligro.
El 31 de octubre de 2021, Medhi Nafti se convirtió en nuevo entrenador del Leganés en sustitución de Asier Garitano. Hoy, 8 de febrero, se cumplen 100 días de un relevo importante por muchos motivos. Primero, porque el sustituido es leyenda al sur de la capital. Segundo, porque la misión del recién llegado se intuía titánicamente compleja, con los pepineros anclados en puestos de descenso. Además, el escogido era un técnico sin amplio bagaje en Segunda División, como él mismo reconoció en su puesta de largo, aquella en la que describió la oportunidad de dirigir a los pepineros como una ocasión única y en la que se marcó como principal objetivo crecer más allá de un inicio de curso impropio de un proyecto como el blanquiazul.
Ahora, ese centenar de días más tarde, el técnico ha cumplido en parte con aquella misión. El Leganés ha despegado y enderezado el rumbo, aunque aún lejos del crecimiento que más de uno ambicionaba para una plantilla que, como insisten incluso sus propios protagonistas, debería tener entre sus objetivos el meterse en puestos de playoff de ascenso. La palabra ascenso se ha convertido en tabú en Butarque.
Leganés: 7º en ‘la Liga Nafti’
Ya entonces se trataba con cuidado, pero el margen de tiempo que tenían los pepineros hacían soñar con una potencial remontada épica que, por ahora, se ha quedado en remontada a secas. Si se hiciera una clasificación desde la llegada de Nafti al banquillo (jornada 14), los pepineros serían séptimos, con 20 puntos de 39 puntos posibles, 14 goles a favor y 12 en contra. Por encima del Lega, sólo Eibar, Girona, Valladolid, Tenerife, Almería y Cartagena han logrado mejores resultados en este periplo. A ello hay que unir dos pases de rondas en la Copa del Rey (ante Xerez y Cultural) y una digna eliminación ante la Real Sociedad en Butarque.
Siendo buenos números, sucede que no han sido suficientemente buenos como para despegarse del todo de los puestos de descenso. Al Lega sólo le separan cinco puntos de las posiciones de peligro, un balance optimista si se tiene en cuenta de dónde venía el equipo cuando Nafti se hizo con sus riendas. En los mismos 13 partidos que ha dirigido el franco-tunecino, el Leganés sólo había cosechado la mitad de puntos (10) y estaba a cuatro de la salvación. Los pepineros eran penúltimos sólo tres puntos por encima del colista.
Mejorías y tareas pendientes
En el debe del entrenador, haber revitalizado a una plantilla que ha ganado en carácter y mejorado en competitividad en todos sus futbolistas. Mientras que con Garitano había hombres desconectados del día a día, con Nafti todos parten con relativa igualdad de condiciones para jugar. Además, el equipo ha mejorado su rendimiento visitante (tres victorias, un empate, tres derrotas) y frenado la tendencia a recibir goles en contra.
En su haber, por el contrario, se mantienen los problemas para vencer en Butarque (dos victorias, cuatro empates) y desconexiones que, por momento, le han costado al equipo duros resultados, como sucedió en Burgos (4-0). El resultado de El Plantío fue guinda nefasta a un mal inicio de 2022 que, tras ganar al Alcorcón y empatar en Tenerife, apunta a enderezarse. Con una mini-revolución invernal en la plantilla, el siguiente reto del técnico pasa por ganar a un Zaragoza que es enemigo directo y tratar de asentarse en la zona tranquila de la clasificación, espacio que, salvo sorpresa, es la aspiración de un equipo mejorado, pero lejos del objetivo inicial que se marcó a principio. De temporada.