Revolución en la cueva del Leganés
El mercado invernal ha cambiado la retaguardia del Leganés con más profusión que cualquier otra línea. Entre portería y defensa, se han contabilizado cuatro movimientos, algunos muy notables.
El Leganés recibió hace poco menos de 14 días una de las goleadas más humillantes que se le recuerda en su época moderna. El 4-0 del Burgos en El Plantío desnudó la endeblez defensiva de un equipo, el pepinero, encallado en los mismos errores, en las mismas tendencias, casi toda la temporada. Excepción hecha de los primeros partidos de la era Nafti, el equipo ha sufrido una endeblez en su propia área que explica buena parte de su errático devenir en lo que llevamos de curso. Ahora, dos semanas después de aquello, la ‘cueva’ de los madrileños ha cambiado notablemente fruto de una reformulación impulsada en el mercado invernal. Así, de los nueve movimientos registrados, cuatro han afectado a portería o defensa y algunos de ellos, con (se espera) importantes consecuencias.
Se busca portero intocable
Empezando, por ejemplo, en la meta blanquiazul. El fichaje de Dani Jiménez, exportero del Alcorcón, hasta 2024 ha sido quizá el movimiento más trascendente que ha hecho el Leganés. Y no sólo por la calidad del lebrijano, seguramente uno de los mejores en su puesto en Segunda División, sino porque supone elevar la competencia en un puesto que, a priori, estaba bien cubierto.
Así se pensaba en el inicio de curso con Asier Riesgo, clave en el buen tramo final de temporada pasada, e Iván Villar, flamante subcampeón olímpico y con reciente y buena experiencia en Primera. Sucede, sin embargo, que el rendimiento de uno y de otro ha sido irregular. Dientes de sierra que los han alternado en el puesto hasta la llegada del propio Jiménez, serio candidato a ser ahora el dueño de la meta blanquiazul a poco que mantenga con el escudo del laurel el excelso rendimiento que tenía con el Alcorcón (segundo portero que más para de la categoría).
La llamativa salida de Tarín
También la defensa ha sufrido notables variaciones, llamativas tanto en la salida de Tarín, como en los fichajes de Nyom y Giraudon. En el caso del ya ex capitán blanquiazul, había en Butarque un alto consenso en que estaba llamado a ser el próximo líder de la defensa pepinera.
Cuando renovó en 2021 hasta 2023 el club estaba convencido de que ataba a un titular por muchos años. Sucede, sin embargo, que su rendimiento ha ido descendiendo a medida que perdía la confianza de sus entrenadores. Esta temporada, Tarín apenas ha disputado 653 minutos en Liga en ocho titularidades con un rendimiento lejos de los que de él se esperaba.
Su último partido en el Leganés, en Burgos (4-0) lo hizo tocado (así lo asegura Nafti) para dibujar un epílogo inesperado a lo que prometía ser una magnífica carrera en Butarque. Tanto el futbolista como el Leganés entienden que su marcha le hará bien a ambas partes, aunque suponga despedir a uno de los mejores recursos que tenía el equipo en su zaga.
Fichajes para ser titulares
El valenciano ha salido impulsado, en parte por la competencia que veía llegar al equipo. Porque el Leganés ha incorporado dos nombres con opciones de ocupar espacios en ese eje de la defensa. Uno, Nyom, llegó con polémica e incluso con petición de la afición para que no se le fichara. Lío que destiló en pitos en su debut para acabar con aplausos ese mismo día. Como lateral derecho bordó una buena actuación defensiva que apunta a convertirlo en habitual de ese costado, donde también está habiendo problemas de regularidad.
Además, el camerunés también puede ejercer de central, puesto para el que el fichaje del experimentado Giraudon añadirá más competencia si cabe. Experiencia necesaria si se tiene en cuenta que Bruno pasará por quirófano para, mínimo, perderse dos meses de competición. Quizá más. De ahí que el Leganés colocara como una de sus prioridades encontrar un central, aunque ya a principios de mercado la dirección deportiva ya andaba buscando hombres para esa posición, seguros de que había que cambiar su fisonomía para frenar los graves problemas que viene lastrando al equipo en lo que llevamos de curso.