REAL VALLADOLID 1 - SPORTING 0
Aprobados y suspensos del Pucela: Toni y Roque, como Sancho y Quijote
El murciano y el canario llevan en volandas al Real Valladolid con una actuación brillante sobre el Sporting, valedera de tres puntos.
De menos a más, conteniendo el buen inicio del Sporting y desmelenándose como suele hacerlo en las segundas partes de Zorrilla, en la portería de los goles, el Real Valladolid dio otro golpe en la mesa del ascenso ganando a los rojiblancos en otra gran actuación global. Esta estuvo liderada por Roque Mesa y Toni Villa, que, al alimón, como Sancho y Quijote, llevaron en volandas a los blanquivioletas hacia los tres puntos.
Masip: Poco exigido mediante disparos, lo estuvo bastante más en la presión de los puntas del Sporting, que provocó algunos despejes defectuosos, varios de los cuales acabaron en las botas de los atacantes rivales.
Luis Pérez: El Sporting le buscó mucho las cosquillas con las incorporaciones de Kravets en los primeros minutos, en las que el partido fue un correcalles. Demasiado solo, aunque no se detuvo en las subidas continuas por banda. Muy sólido.
Javi Sánchez: Seguro en la anticipación ante Djuka y sereno con espacios. Se encuentra quizás en su mejor momento desde que es futbolista del Real Valladolid, lo que se nota en los pocos goles encajados recientemente.
El Yamiq: Intervino mucho con balón, forzado por los automatismos de presión del Sporting. Se llevó un golpe duro cerca del descanso por un mal pase de Cristo. Fue creciendo en las vigilancias conforme creció el equipo.
Nacho: Vivió en campo rival y pisó incluso área en un par de ocasiones. Atentísimo para sacar rápido el saque de banda que acaba en el 1-0, en el que, además, asistió. Atrás, como a Luis Pérez, le buscaron en el arranque sin éxito
Óscar Plano: Mediapunteó, como suele hacerlo, pero seguramente posicionándose muy lejos de Luis Pérez. Se le acercó más en el segundo tiempo, pero no lo suficiente y Pacheta optó porque fuera de los primeros cambiados.
Roque Mesa: Desahogó con varios balones largos acertados en el inicio más atascado. Desperdició la pena máxima, flojita y al centro. Se resarció con el gol en una jugada eléctrica. Se marchó ovacionado, premio a su segunda parte de muchos quilates.
Aguado: Como Roque Mesa, tardó un poco en encontrarse a gusto, pues el Sporting salió presionando mucho. Empujó hacia adelante y con ello el equipo se asentó en campo rival. Vio la quinta amarilla por un exceso de confianza de Narro.
Toni Villa: Dejó un cañito y un pase entre líneas que dieron muestras de su calidad. En otro de estos, generó la ocasión de Cristo. En otro gesto técnico, provocó el penalti. Sin florituras de cara a la galería, efectista pero bonito, cuajó un gran partido.
Cristo: Aumentó la presencia en el área de los atacantes del Real Valladolid. Participativo, buscó puerta en varias ocasiones, precipitándose en alguna. En la más clara, Mariño le sacó el gol con el pie. Mereció la recompensa del gol.
Weissman: De nuevo, al cuadro blanquivioleta le costó encontrarle. Lideró la presión sobre dos centrales acostumbrados a tener mucho el balón. Ese trabajo no tuvo traslado en ocasiones por los centros desacertados de sus compañeros.
También jugaron en el conjunto de Pacheta:
Víctor Narro: Erró en alguna toma de decisiones, como en la primera, que disparó mal. Dio un mal balón a Aguado que acabó en una pérdida que pudo provocar una contra.
Sergio León: Facilitó alguna llegada más de Luis Pérez cayendo a su lado, tal y como acostumbra a hacer, aunque, a cambio, se perdió presencia en el área.
Anuar: Roque Mesa sintió un 'ay' y pidió el cambio, dando lugar a las piernas frescas del ceutí, que, al menos por esta vez, estuvo por delante de Kike Pérez.
Morcillo: Acusó, quizás, falta de tensión en su primer contacto, que perdió. Fue el único balón que llegó a tocar.